Ya habíamos hablado del Plan Pive en profundidad. Resumiendo, desde el pasado 1 de octubre hasta el 31 de marzo (o hasta que duren los 75 millones de euros que aporta el gobierno), hay una subvención de 2.000 euros a la compra de un coche nuevo.
En total se prevé que se realicen 75.000 operaciones de compra con el plan, unas 40.000 antes de que finalice 2012. Con ello se pretende poner freno a la caída de matriculaciones en España, que recibieron la última estocada con la subida del IVA.
De esos 2.000 euros, 1.000 los aportan los fabricantes y los otros 1.000 proceden de ayudas públicas. Pero ojo, los mil euros de subvención del Estado le tributan en la declaración de la renta como también ocurría con el anterior Plan 2000E.
El motivo es que esta ayuda se considera una ganancia patrimonial no derivada de una operación de transmisión, como suele ocurrir con las subvenciones y forma parte de la base imponible general y, por tanto, sujeto a una carga impositiva sujeta al tramo al que esté tributando cada persona. Los 1.000 euros que aportan los fabricantes están exentos de tributación por considerarse promoción de una empresa privada.
¿Y cuánto pagarás en tu próxima declaración de la renta si te acoges al Plan de Incentivos al Vehículo Eficiente (PIVE)? Pues depende del tramo del IRPF en el que te encuentres. Las tablas del IRPF aprobadas para 2012 – 2013, determinan cuántos impuestos pagarás por el plan PIVE según el tramo en el que se ubique nuestra base imponible:
- De 0 a 17.707 euros se aplicará un 24,75%, que supone pagar 247,5 euros de impuestos.
- De 17.707 a 33.007 euros se aplicará un 30%, que supone pagar 300 euros de impuestos
- De 33.007 a 53.407 euros se aplicará un 40%, que supone pagar 400 euros de impuestos.
- De 53.407 a 120.000 euros se aplicará un 47%, que supone pagar 470 euros de impuestos.
- De 120.000 a 175.000 euros se aplicará un 49%, que supone pagar 490 euros de impuestos.
- De 175.000 a 300.000 euros se aplicará un 51%, que supone pagar 510 euros de impuestos.
- Para las bases superiores a los 300.000 euros se aplicará un 52%, que supone pagar 520 euros de impuestos (más de la mitad de la ayuda del Estado).
Fuente: BBVA