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Christian Benjumea

10 tramos de carretera peligrosos sobre los que hay que actuar ya

Un informe reciente realizado de manera exhaustiva por RACE, vuelve a poner de relieve el peligro que tiene el descenso en la inversión estatal en el mantenimiento de las carreteras. Algo que es también extrapolable a la disminución en la realización de campañas de seguridad vial, y que entre otros factores, explica la preocupante reversión en la tendencia de las muertes en carretera.

Como es bien conocido, la peligrosidad de las carreteras convencionales es significativamente mayor a la de autovías y autopistas. De forma trágica, las estadísticas nos dicen que de cuatro accidentes que se producen en carreteras, tres se ocasionan en carreteras convencionales.

Entre los factores de riesgo, podemos destacar el trazado de la vía, el número de carriles, la escasa visibilidad y por tanto el aumento en el tiempo de reacción.

Según recuerda RACE en dicho informe, la mayoría de accidentes que se produjeron el pasado año tuvieron lugar en carreteras convencionales o secundarias. Si extremar la precaución en estas vías es crucial, el informe va más allá señalando que hay un 14,44% de los tramos de carreteras nacionales que presentan una peligrosidad de nivel medio-alto o alto. Dichos tramos en cuestión son los siguientes:

1. N-120 Lugo-Ourense

A la altura del kilómetro 535,2 en Lugo y hasta el kilómetro 549,5 en Ourense, hay un tramo de concentración de accidentes especialmente preocupante. El año pasado se registraron en dicho tramo 10 accidentes graves y uno mortal. A esto hay que añadir que además es un tramo con una intensa circulación de tráfico diario.

2. N-260 Girona

22 heridos graves y 2 fallecidos, fue el triste balance que dejó el pasado año el tramo de 62,2 kilómetros que separan los kilómetros 117,3 y 179,5 de la N-260 de Girona. Vecinos de la zona llevan años reclamando soluciones integrales a dicho problema sin que las autoridades tomen iniciativas claras y efectivas.

3. N-330 Huesca

En la provincia de Huesca, y entre el kilómetro 624,2 y 643 de la N-330, se produjeron 6 accidentes graves y uno mortal que acabó con la vida de una persona. Dicha vía, tiene actualmente un estado preocupante debido a los escasos trabajos de mantenimiento y a las condiciones del entorno.

4. N-541 Pontevedra

Un fallecido y 5 heridos graves se concentraron el pasado año en este tramo que va desde el kilómetro 75,2 hasta el 87. Este punto negro, repite cada año posición en esta triste lista. Es por ello, que se decidieron colocar una serie de radares fijos con los que alertar a los conductores que circulen por esta vía. No obstante, parece ser que esta medida no ha sido capaz por si sola de resolver el fatídico problema de seguridad que tiene.

5. N-642 Lugo

Este tramo de apenas 8,2 kilómetros (desde el punto 0), concentró el pasado año 3 accidentes graves, suponiendo el tramo con una de las mayores tasas de accidentes por kilómetro recorrido.

6. N-629 Burgos

Si buscas N-629 en internet, de forma trágica se suceden las noticias que comunican de accidentes graves y fallecimientos en dicha vía. La peligrosidad aumenta de manera exponencial entre el kilómetro 33,7 y 48 con dos fallecidos y seis heridos graves el pasado año.

7. N-234 Soria

Tres fallecidos y tres heridos graves fue el saldo del año pasado en el tramo de esta carretera castellano-leonesa. Los kilómetros en cuestión de mayor riesgo son los que separan el punto 398,2 del 408,4.

8. N-122 Soria

Un poco más arriba de la anterior carretera citada, en la N-122 y entre el kilómetro 95,8 y el 103,6, se registraron el pasado año un total de accidentes con dos fallecidos y un herido en estado grave.

9. N-630 Asturias

El índice de riesgo de esta vía, y en particular del tramo de 20,5 kilómetros entre los puntos 66,6 y 87,1 a través del puerto de Pajares, es muy superior al riesgo medio de cualquier via nacional. Esto se contabiliza con el balance del año pasado de 9 accidentes graves con un fallecimiento y 8 heridos graves.

10. N-432 Badajoz

Una vez más, encontramos un tramo de carretera de escasos 10,7 kilómetros entre el punto 142,9 y el 153,6, que el pasado año se llevó la vida 3 personas y dejando a otras 3 personas con secuelas de especial gravedad. De lo que llevamos de año, la vía en su totalidad contabiliza el mismo número de fallecimientos que el total del año pasado.

Ante esta información de dominio público, ¿están las autoridades cometiendo graves irresponsabilidades al no adoptar políticas más ambiciosas para el control de los puntos negros?

Fuente: RACE

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