El pasado verano Bugatti asombraba al mundo en Pebble Beach con el nuevo W16 Mistral de 1600 CV, un ostentoso canto de cisne para su motor W16. Al mismo tiempo que presentaba su automóvil públicamente, muchos multimillonarios de todo el mundo se enfadaban al conocer que sus 99 unidades estaban todas vendidas. Ahora, se repite esta sensación con los hijos de esos magnates. Y es que la marca ha anunciado el Bugatti Baby II Carbon Edition, un «juguete» de estilo clásico disponible que solamente pueden comprar los propietarios de un Mistral.
El Bugatti Baby II Carbon Edition mide 2,8 metros de longitud y ha sido desarrollado junto a The Little Car Company. Su diseño evoca al del Type 57 Roadster Grand Raid que influyó en el diseño del W16 Mistral más incluso que el Chiron en quye se basa. Eso se debe a que el Bugatti Baby II de 2019 es una recreación moderna del Bugatti Baby de Ettore Bugatti creado en 1926. La versión moderna es un modelo a escala del 75% del roadster Type 35 con un motor eléctrico de 4 a 10 kW de potencia. Tiene los anchos de vía clásicos readaptados y un volante de madera de cuatro radios como el Type 35.
Fabricado en fibra de carbono, como podías sospechar, hay elementos visibles alrededor del radiador y la parrilla, salpicadero, paneles interiores, soporte del retrovisor o en el centro del volante. La compañía asegura que los faros LED de diseño horizontal simulan a los del W16 Mistral.
La rueda de repuesto de montaje lateral y el soporte de otros Bugatti Baby II se han eliminado para crear aligerar el peso. Así puede alcanzar velocidades de hasta 68 km/h, siempre que pulses el botón de velocidad máxima, diseñado como el que hay en el modelo real. Eso indica que estñá lejos de los Baby originales (eran más pequeños, para niños). Ahora no hay edad legal para conducirlos (en carreteras no se puede al no estar homologados, solamente en propiedades privadas), pero como los pedales de aluminio son ajustables, puede llevarlo incluso un adulto de 1,90 metros de altura.
Su precio es de 80.000 €, pero el mayor obstáculo es que el padre del niño haya reservado una de las 99 unidades del W16 Mistral por cinco millones. Y ojo, luego puede personbalizarse, adapatando cada Bugatti Baby II Carbon Edition para que el vehículo del hijo sea tan exclusivo y personalizado como el del padre.
Fuente: The Little Car Company
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