Si hace unos días la marca inglesa presentaba un renovado Land Rover Discovery de cara a 2014, ahora anuncia la puesta al día de los y Range Rover Sport para 2014. Las mejoras se centran en nuevas tecnologías y mayor número de opciones. Las primeras unidades de los modelos con estas novedades seran a principios de 2014, si bien desde finales de septiembre ya se admitirán pedidos.
Las nuevas tecnologías de asistencia al conductor disponibles en la gama incluirán: sensor de reconocimiento de señales, alerta de cambio involuntario de carril activo (realiza correcciones en el volante). También se incluyen un sensor de aproximación de vehículo, detección de tráfico marcha atrás y un sistema de cámaras que facilita el enganche de un remolque sin ayuda exterior. Como colofón, incluye sistema de aparcamiento automático en batería como novedad del sistema de ayuda al aparcamiento paralelo.
El nuevo sistema Land Rover InControlTM ofrece amplias posibilidades de conectividad. Cuenta con una aplicación para smartphone que permite comprobar la seguridad de su vehículo, los niveles de combustible y del líquido limpiaparabrisas, además de la presión de los neumáticos. En caso de robo, activa una alarma silenciosa y hace un seguimiento del vehículo. También facilita una conexión Wifi a los ocupantes, con una antena 3G WiFi.
La oferta de propulsores de aumenta con la llegada del potente 4.4 litros SDV8 diésel al nuevo Range Rover Sport presentado en 2013. Con 339 CV y un enorme par de 700 Nm, este turbodiésel anuncia unas prestaciones excelentes. Va unido a una transmisión automática ZF de 8 velocidades, y equipado con el Dynamic Pack acelera de 0 a 100 km/h en 6,9 segundos y alcanza una velocidad punta de 225 km/h.
Además de este propulsor, los Range Rover y Range Rover Sport estarán disponibles con el motor de gasolina 5.0L V8 S/C de 510 CV y los diésel 3.0L TDV6 de 258 CV y 3.0L SDV6 de 292 CV, este último disponible solo para el Range Rover Sport.
La gama se completará con la llegada de los Range Rover híbridos, los primeros híbridos fabricados por Land Rover que monta un motor turbodiésel SDV6 de 3 litros y 292 CV de potencia está unido a un cambio automático ZF de ocho velocidades con un motor eléctrico de 35 kW en lugar del habitual convertidor de par. La potencia total del sistema es de 340 CV, con un par máximo de 700 Nm. Pueden acelerar de 0 a 100 km/h en menos de siete segundos con unas emisiones de CO2 de 169 g/km y un consumo en ciclo combinado de 6,4 l/100 km.
Para ampliar aún más las opciones, el Range Rover estará disponible con un nuevo Black Design Pack. Este paquete se puede sumar a los acabados Vogue y Autobiography y cuenta con una amplia gama de piezas acabadas en negro brillante, entre ellas el letrero Range Rover de capó y portón trasero, la parrilla delantera, los retrovisores exteriores, las manetas exteriores de las puertas, las tomas de aire del paragolpes, las rejillas de ventilación laterales, las tuercas de las ruedas y el remate del portón, además de una nueva selección de llantas de aleación de 21 y 22 pulgadas con un nuevo tipo de acabado.
En el interior de los nuevos Range Rover se ha añadido la opción de reglaje eléctrico para la zona superior de los asientos delanteros, mientras que los pasajeros de las plazas traseras se pueden beneficiar de unas pantallas opcionales de mayor tamaño, 10,2 pulgadas, para el sistema de entretenimiento.
Fuente: Land Rover