El Ford Focus 2018 fue presentado hace apenas una semana y sorprendió al mundo por su diseño y novedades tecnológicas. Aunque probablemente la clave principal era la adopción de la nueva plataforma C2, convirtiéndose en el primer coche de la marca en utilizarla. En el compacto promete una rigidez torsional un 20 % mayor y el uso de nuevas mecánicas con unas dimensiones prácticamente iguales. Sin embargo, hay mucho más detrás de la nueva arquitectura.
En la marca del óvalo ya se han atrevido a compararla con el Santo Grial, simbolizando que será un elemento que lo cambiará todo. También se ha llegado a comparar con la archiconocida plataforma MQB del Grupo Volkswagen. El objetivo es que en cinco años se ahorren 4.000 millones de dólares gracias a eficiencias de ingeniería a la vez que se reduce el tiempo de desarrollo de nuevos modelos hasta en un 20 %.
Porque la cosa no se quedará en el nuevo Focus, la plataforma C2 también es muy modular y puede abarcar varios segmentos. Podría adaptarse en un futuro a utilitarios como el Fiesta y también a SUV como el EcoSport (pequeño) o el Edge (mediano). Llegando a más modelos se conseguirían reducir los costes de producción, teniendo elementos comunes entre vehículos como las mecánicas y transmisiones, estructuras del interior, sistemas multimedia o módulos de suspensión.
Este proyecto es mucho más ambicioso y a largo plazo que el que se vio con la anterior plataforma C1 (todavía presente en modelos más longevos). Ya se han empezado a ver las primeras medidas para alcanzar la economía de escala. Por ejemplo, el anterior Ford Focus tenía 360 configuraciones posibles en Estados Unidos y el actual solo tiene 26. Unificar los distintos mercados y ofrecer un producto más global puede ser complejo, pero a la larga sería beneficioso para Ford.
Aunque la hayan comparado con la plataforma MQB de Volkswagen, todavía les queda camino por recorrer. Los alemanes llevan con ella desde 2011 y actualmente está en un 40 % de sus productos, un porcentaje que crecerá aún más en los próximos años. Pero Ford cree haber dado en la tecla con su plataforma C2 y llevará esta estrategia adelante. Incluso está trabajando en más arquitecturas nuevas para abarcar sectores como el del vehículo industrial o los eléctricos.
Fuente: Automotive News