Europa es el continente más restrictivo con las emisiones de CO2. Por estos lares se vigila con lupa la contaminación causada por los distintos medios de transporte, haciendo especial hincapié en los vehículos. Por eso la apuesta principal está en la electrificación y dentro de unos años los eléctricos serán la norma. Tanto es así es que la Comisión Europea invierte 4.600 millones de euros en dos nuevas propuestas que quieren acelerar la adopción de esta tecnología. Saben que la descarbonización pasa por el esfuerzo conjunto y se van a centrar en baterías para eléctricos e hidrógeno verde.
La primera convocatoria es la que tiene en cuenta las baterías de los vehículos eléctricos. Con un presupuesto de 3.400 millones de euros ayudará a reforzar el liderazgo y la capacidad de producción de estos elementos clave para los eléctricos. Todo ello mientras se avanza hacia la neutralidad en carbono para el año 2050. Hay una convocatoria general a proyectos de tecnología de cero emisiones netas, por valor de 2.400 millones de euros, que tendrán que demostrar ser innovadores, replicables y rentables. Los 1.000 millones restantes van para la fabricación de celdas de batería de eléctricos o implementar técnicas y procesos que mejoren su producción.
Por otro lado, hay una segunda acción que consiste en la creación del Banco Europeo del Hidrógeno. La Comisión ha puesto 1.200 millones de euros y se van a sumar más de 700 millones adicionales de tres estados miembros. La clave es que este combustible que tanto potencial tiene sea obtenido de una forma renovable y de origen no biológico. El papel del hidrógeno podrá ser destacado en un futuro gracias a la tecnología de pila de combustible como extensor de autonomía para los eléctricos. En el transporte pesado podría ganar enteros para conseguir largas distancias sin apenas parar, pero su obtención limpia es de vital importancia.
Esta inversión por parte de la Comisión Europea no tiene lugar en proyectos propios, funciona más bien como subvención para proyectos de tercerosque sean interesantes en la materia mencionada. Aquellos que estén trabajando en el desarrollo de baterías para eléctricos e hidrógeno verde podrán presentar sus candidaturas hasta el 24 de abril de 2025. Aunque las subvenciones no llegarán hasta el primer trimestre del 2026, lo cierto es que podrían ser beneficiosas. España ha anunciado su participación, por lo que podrá utilizar fondos nacionales para apoyar proyectos en su territorio sin necesidad de realizar una subasta separada a nivel nacional.
Fuente: Comisión Europea