Solo con el título ya dan ganas de saber el precio. Este es posiblemente uno de los coches de mi TOP 5 imaginario de mis años mozos. En cualquier videojuego el Dodge Viper GTS azul con rayas blancas era sinónimo de victoria y de selección. Una de las unidades más cuidadas del mundo sale a subasta próximamente, pero más allá de la historia de este Viper, tenemos que hablar de su propietario.
Y es que el valor de un coche en subasta también asciende o desciende según quien sea o haya sido su propietario. Esta unidad no es de ninguna estrella de Hollywood, si no de John Herlitz, el hombre que lo hizo posible.
John Herlitz
John Eric Herlitz (1942 – 2008) fue un destacado ingeniero industrial estadounidense conocido principalmente por su contribución al diseño de automóviles en Chrysler, en particular al Plymouth Barracuda de producción y al concept car Dodge Copperhead. Después de graduarse en 1964, Herlitz se unió a Plymouth, donde creó el Barracuda SX, un automóvil de exhibición que tuvo una gran influencia en el diseño del Plymouth Barracuda de 1967.
Más tarde, lideró el diseño del completamente nuevo Barracuda y ‘Cuda de 1970, así como el del Plymouth GTX y el Plymouth Road Runner de 1971. A lo largo de su carrera, desempeñó un papel fundamental en el diseño de diversas generaciones de vehículos, incluyendo los K-cars, minivans y coches de cabina adelantada, así como en la creación de concept cars.
En 1994, fue nombrado vicepresidente de diseño de productos y, posteriormente, ascendió a vicepresidente senior de diseño de productos. En junio de 2000, Herlitz anunció su intención de retirarse de Chrysler, donde también contribuyó a la creación del Museo Walter P. Chrysler, siendo el lugar de su fiesta de jubilación en noviembre de 2000. Finalmente, en enero de 2001, se retiró oficialmente de Chrysler.
Después de su retiro, Herlitz participó en el diseño de un edificio de artes visuales en Michigan, formó parte del consejo asesor corporativo del Interlochen Center for the Arts y fue juez en diversos concursos de automóviles.
El diseño de una obra maestra
Dodge Viper GTS de 1996
El Dodge Viper GTS 1996 es una joya automovilística que destaca por su diseño, esencia, aspiración y rendimiento. Con su inconfundible color Viper GTS Blue y llamativas rayas blancas, este vehículo llama la atención en cualquier lugar o en cualquier videojuego; yo personalmente solo aspiro a verlo en pantalla. Equipado con faros delanteros estilo proyector, capó ventilado y salidas de escape dobles en el centro, rinde homenaje a su legado de alto rendimiento.
La unidad monta llantas de 17 pulgadas originales de cinco radios con neumáticos Pilot Sport de Michelin y sistema de frenado controlado por discos ventilados en las cuatro ruedas.
La belleza está en el interior
Imagínate entrar en el Viper: abres la puerta y te sumerges en un lujoso interior noventero revestido de cuero negro, armonioso como su exterior. Con características como aire acondicionado, pedales ajustables, elevalunas eléctricos y un sistema de sonido Alpine con reproductor de CD, para poner discos de Estopa. Este interior esa comodidad y entretenimiento a partes iguales.
El volante forrado en cuero enmarca un velocímetro de 200 mph (321 Km/h) y un tacómetro con una línea roja que llega a las 6.000 rpm, manteniendo el enfoque en la experiencia de conducción.
Symphony of destruction
Bajo el capó tenemos el motor VIPER OHV V10 de 8.0 litros que produce 450 caballos de fuerza (443 CV) y 490 lb.-pie de torque (665 Nm) de fábrica. Este motor tan potente se combina con una transmisión manual Tremec T-56 de 6 velocidades, proporcionando una conexión directa entre el conductor y la máquina, asegurando un rendimiento excepcional.
Asegurando que vuelves a ser padre o madre otra vez. Lo siento pero siento devoción por este coche.
La clave está en los cuidados
Este Viper acumula, ojo, 4.200 millas (6.759 kilómetros) en el odómetro. Este Viper GTS Coupé es un testimonio de una conservación meticulosa. El actual propietario, el hijo de John Herlitz, ha cuidado de preservar esta pieza de la historia del automóvil.
Recientes mantenimientos, como el reemplazo del líquido de frenos, demuestran su compromiso con el vehículo. El informe Carfax confirma su impecable historial, sin accidentes ni daños, y la reciente prueba de emisiones de 2023 destaca su aptitud para seguir circulando.
El que lo quiera, a parte de pujar por la máquina, pujará por una colección de piezas seleccionadas: obras de arte, fotografías, documentación original y algún que otro gadget moderno. Veremos el resultado de la puja.
Fuente: Bring a Trailer, John Herlitz.org
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