Cuando conocimos el fabuloso Ferrari FF nos recordó ligeramente a la variante con tracción total del Jensen Interceptor, uno de los coches que nunca me importaría que ocupasen la plaza de garaje que, justo esta semana, ha dejado de ocupar mi Golf GTI III sobre el que escribí comparándolo con el Golf GTI VI.
Y es que el Jensen Interceptor es un coche que resulta atractivo por numerosas razones. Además de tener un nombre realmente genial, tiene el estilo inconfundible de los GT de los años 70 y, un motor V8 de 6,3 o 7,2 litros de esos que hacen que tu testosterona explote directamente en tu cara. Si eres un fan de Top Gear seguramente conocerás el programa que le dedicaron en su 17ª temporada. ¿No? Puedes verlo aquí (y sí, lo adoran tanto como nosotros).
Ahora acabamos de enterarnos de que el dueño de un Jensen Interceptor III (después de gastarse 75,000 libras en restaurarlo para dejarlo como los chorros del oro) sale a subasta en Silverstone este 16 de mayo de 2012. Y ojo, que su precio estimado es de 40.000 o 50.000 libras, según la casa de subastas.
No hagas la conversión. Son entre 50.000 y 62.000 euros. Una cantidad alta, pero aceptable (ojo que es de esos clásicos se revalorizan mucho). El Jensen Interceptor se fabricó a mano en el Reino Unido por Jensen Motors entre 1966 y 1976. Y es especial porque rompió con la tradición de Jensen de tener una carrocería de acero y por tener el cuerpo diseñado por una empresa externa, la italiana Carrozzeria Touring, la firma más reconocible asociado con la talla de Aston Martin, Lamborghini, Maserati y Alfa Romeo.
El motor era un V8 de Chrysler, inicialmente de 6.276 cc, con transmisión manual opcional, pero la opción más común era la transmisión automática TorqueFlite, que movía las ruedas traseras a través de un diferencial de deslizamiento limitado y un eje Salisbury trasero. En 1971 el motor creció hasta los 7.212 cc y se le incluyó un carburador de cuatro cuerpos.
El Interceptor tomó sus rasgos estilísticos del Uirapuru Brasinca, un cupé brasileño muy poco conocido (prometemos hablar pornto de él), que en los 60 ya lucía esa enorme luneta trasera que se curvaba y servía de «puerta» trasera. La especificación original incluye elevalunas eléctricos, asientos delanteros reclinables, una rueda de madera con bordes de dirección, radio con altavoces dobles, luces de marcha atrás y un reloj eléctrico. Dirección asistida fue incluido como estándar a partir de septiembre de 1968.
El Mark II Interceptor se presentó en octubre de 1969 con un estilo revisado frontal y frenos de disco ventilados, y poco después, en 1971, fue el Mark III. Se habían revisado los asientos e incluía llantas de aleación, además de algunas otras mejoras… y la restauración realizada ha sido una de las más exigentes y meticulosas que hemos visto nunca. El dueño se hizo con un vehículo con 25.000 millas en el odómetro y que sólo había pasado por dos dueños. Con esa base, se propuso construir el mejor Jensen Interceptor que hay ahora mismo en el planeta.
El vendedor puso a trabajar en él a artesanos (con horarios y fechas de entregas estipulados), y a pesar de encontrarse con elevadas facturas, la calidad de la tarea fue siempre primordial. Tras una revisión mecánica completa se reconstruyó el motor, se restauró la caja de cambios, se colocó un embrague nuevo y renovaron el eje trasero. Para contrarrestar los 330 CV de su motor de 7,2 litros, han instalado nuevos frenos mejorados y han incluido un sistema con tres ventiladores para refrigerarlo mejor y un alternador de servicio, para mejorar la usabilidad de este automóvil, por sí sumamente capaz.
En el interior para cuatro pasajeros, se han restaurado hasta las alfombras. Lleva los asientos de cuero y el volante original. En el panel de instrumentos se han incluido también discretas mejoras modernas, como un sistema de aire acondicionado (tan eficiente como el de muchos coches modernos), además de una radio con sistema incorporado de navegación por satélite de la marca Porsche.
De acuerdo, no es un Aston Martin, pero hemos leído en un blog británico que el Jensen Interceptor era el Aston Mustang Martin. ¿Y puede haber algo más maravilloso que eso? Ahora, a ver si el departamento de financiación de coches de la empresa se estira un poco…
Vía: Classic car for Sale
Galería de fotos del Jensen Interceptor III: