El Lamborghini Aventador se presentó oficialmente en el Salón de Ginebra. Hay varias características que hacen de este superdeportivo algo especial, como que sólo se ha fabricado una unidad, que será posteriormente matriculada y vendida a un privilegiado (y adinerado) comprador, que a buen seguro disfrutará de este «purasangre».
Empezamos por el exterior: la carrocería tiene un diseño inconfundiblemente Aventador -modelo del que procede-, pero si nos fijamos bien, veremos que ni un solo panel de la carrocería es idéntico a los del Aventador Coupé. El habitáculo al completo ha sido destripado de todos los elementos esenciales, con sólo tres espejos retrovisores rompiendo el perfil lateral del coche. Dos plataformas antivuelco se sitúan junto a las gigantescas entradas de aire para el motor. Es un diseño que profesa agresividad en estado puro.
En cuanto a la zaga, ha sido cortada totalmente, con 4 tubos de escape asomando, destilando potencia. La pintura del Aventador J es un rojo especial, con tintes cromados que visualmente serán increíbles. Pero no solo esto. Este modelo ha «adelgazado»: se queda en 1.575 kg gracias a la eliminación de equipamiento, al mismo tiempo que se mantiene la rigidez gracias al chasis monocasco de carbono, sus subchasis y el uso extensivo de materiales ligeros.
Los dos asientos están construidos en un nuevo material llamado Carbonskin, que no es otra cosa que fibras flexibles entrelazadas de fibra de carbono. Este animal de carretera lleva un motor 6.5 V12 de 700 CV y la caja de cambios ISR de 7 relaciones que podemos encontrar en el Aventador de calle. El sistema de tracción integral tampoco varía. Sus dimensiones son extremas: 4,89 metros de largo, 2,03 metros de ancho y sólo 1,10 metros de alto.
En cuanto a su «rendimiento«, parecido al que nos tiene acostumbrados el Anventador Coupé, es decir un 0 a 100 km/h de 2,9 segundos y una punta de unos 350 km/h. Ante la ausencia total de parabrisas, se hace imprescindible ropa de moto, al menos, y un casco. La aerodinámica de este deportivo se apoya en paragolpes rediseñados, llantas que actúan como deflectores y un spoiler trasero de dimensiones generosas.
Galería de imágenes del Lamborghini Aventador J: