El coche autónomo de Google o coche Koala, como es más conocido por su parecido físico con este animal, comenzará a circular este verano y dejará de estar en fase de prueba, ya que, hasta ahora, el vehículo sólo se había movido por el cuartel general de la empresa en Mountain View. Sin embargo, ahora Google pretende abrir el uso del coche a más personas, ajenas al proceso de creación, y así poder comprobar cómo se desenvuelve en la vida cotidiana. Concretamente, se quiere poner a rodar 24 vehículos para comprobar el correcto funcionamiento de los sistemas de conducción, navegación, o seguridad, entre otros.
En realidad, los “Google Car” son LexusRX450H modificados que ya han circulado más de 2,7 millones de km dentro de las instalaciones de Google y han tenido 11 incidentes leves (siempre por culpa de otros vehículos, asegura Google). Eso sí, todavía mucho tienen que mejorar en su conducción porque conducen como auténticos abuelos.
Según Google es porque el sistema tiene acumulado el equivalente a varios años de experiencia al volante, aunque, según la opinión de un conductor anónimo que ha probado el coche, más bien parece el coche está siendo conducido por un «abuelete».
El coche de Google es prudente, no pasa de 40 km/h y nunca adelanta
El coche funciona con una cámara de vídeo, sensores tridimensionales y un localizador láser en el techo que le permite ubicar el tráfico y los peatones. Su software reconoce los carriles, las señales de tráfico y calcula la distancia de seguridad.
De esta manera, el Google Car conoce las normas, por supuesto, las respeta, es prudente, reduce la velocidad en las curvas y nunca, nunca va a más de 40 km/h. Acelera y frena suavemente y, además, como señal de precaución nunca adelanta. En definitiva, estas medias de seguridad lo hacen desesperadamente lento y eso puede convertirse en algo peligroso para el resto de coches, además de causar importantes atascos.
El coche autónomo de Google tiene prevista su llegada en el año 2020, así que aún queda tiempo para solucionar estos y otros inconvenientes que puedan ir surgiendo.
Fuente: Google