Parece ser que en el mundo automovilístico auguran un gran futuro para los coches eléctricos y es que para el año 2022 según un informe de Bloomberg, ya predicen el fin del petróleo y mayores ventas de los coches eléctricos.
Esto se debe a que los precios de las baterías cayeron un 35% el año pasado y dan pie a creer que están en una trayectoria para que los vehículos eléctricos puedan llegar a ser tan asequibles como sus homólogos de gasolina o diésel en los próximos años, según el análisis del mercado de vehículos eléctricos realizado por BNEF (Bloomberg New Energy Finance).
El despegue de estos coches es vital en la reducción de las emisiones de carbono que provocan el cambio climático y en la lucha contra la contaminación del aire urbano que tanto nos afecta. Pero, a pesar de las ayudas económicas en muchos países, los vehículos eléctricos siguen siendo más caros que los coches convencionales. En la actualidad, sólo el 1% de los vehículos nuevos vendidos son eléctricos.
Para los cálculos de esta pequeña premonición han tenido en cuenta el coste de adquisición de cada vehículo y su mantenimiento, así como la evolución del precio del barril de petróleo proyectada por el gobierno de Estados Unidos (entre 50 y 70 dólares en la década de 2020). De ello han deducido que las baterías cada vez vayan a ser más baratas.
«Los costes de las baterías de iones de litio ya han bajado un 65% desde 2010, alcanzando los 350 dólares por kWh el año pasado. Esperamos que los costes de las baterías de los vehículos eléctricos estén por debajo de los 120 dólares por kWh en 2030, y que caigan todavía más conforme avanza la química», explica Salim Morsy, uno de los analistas de este estudio.
Teniendo todos estos datos en cuenta, desde el BNEF creen que para el año 2040 habrá un mayor porcentaje de vehículos eléctricos vendidos, con un precio que será inferior a los 22.000 dólares para los vehículos de largo alcance. Esto causará que se reduzca el consumo de combustibles fósiles (un 14% según el informe), pero también que se consuma más electricidad (un 8%) según estas mismas estimaciones.
En los próximos años, el plan de Tesla, Chevrolet o Nissan será comenzar a vender coches eléctricos de largo alcance por unos 30.000 dólares. Otros fabricantes de automóviles y empresas de tecnología están invirtiendo miles de millones de dólares y euros en nuevos modelos. En 2020, algunos de ellos ya tendrán un coste menor y darán mejores resultados que los coches de gasolina. Ahora si los coches eléctricos se hacen con el poder de las carreteras en los próximos años ¿qué pasará con toda la demanda de petróleo de sus homólogos de gasolina?
Para resolver esta cuestión, la nueva serie animada de Bloomberg Más pronto de lo que piensa, se calculó el efecto del continuo crecimiento hasta llegar al 60%. Se encontró que los vehículos eléctricos podrían bajar la demanda de petróleo en 2 millones de barriles por día ya en 2023. Una cifra bastante alta, pero de momento las empresas petrolíferas no se preocupan ya que ven lejano la disminución del costo de las baterías.
El análisis de BNEF se centra en el coste total de propiedad de los vehículos eléctricos, incluyendo cosas como el mantenimiento, los costos de la gasolina, y, lo más importante, el coste de las baterías. Es por esto que calculan que para 2040, el 35% de las ventas de coches del mundo serán eléctricos, ya que el coste de las baterías se encamina en la dirección correcta.
Fuentes: Bloomberg, The Guardian