El Citroën AMI es unas de las opciones urbanas más llamativas actualmente. Y eso que ni siquiera es un coche, el eléctrico biplaza está considerado como un cuadriciclo ligero que puede ser conducido sin carnet de conducir tipo B (bastaría con la licencia AM desde los 16 años). Su diseño y aspecto no dejan a nadie indiferente, aunque esto se puede llevar un paso más allá a partir de ahora. La marca francesa presenta nuevas opciones de personalización para darle más exclusividad al pequeño de la casa.
Citroën siempre ha destacado por la configuración de sus vehículos con colores y contrastes, y eso tenían que aprovecharlo en el AMI. Sus formas y tamaño lo hacen el recipiente perfecto para sacar decoraciones, algo en lo que han estado trabajando con su socio Faab Fabricauto. Ya de fábrica, la marca ofrece seis patrones diferentes de gráficos: Jungle, Tutti Frutti, Globetrotter, Camo, Tribe y Trendy. Estas pegatinas las pega el propio usuario en el vehículo y se dan en varios paquetes.
Por 29 euros se ofrece la decoración para las vainas de la puerta inferior, por 69 euros se incluyen cuatro decoraciones (tres en la vaina grande y una en la pequeña) y por 89 euros se completa con la pegatina para parachoques delantero y la del paragolpes trasero. Sin embargo, la personalización del Citroën AMI no termina ahí. El usuario también podrá pedir pegatinas personalizadas hechas a partir de la imagen o foto que quiera. En ese caso, el precio varía entre los 259 y 359 euros con la decoración parcial y llega hasta los 619 euros en la completa.
Cuando lo pusimos a prueba ya pudimos comprobar que el AMI era un buen recipiente para la innovación. Desde su lanzamiento se ofrece en con un total de siete versiones y tres niveles de personalización que incluyen kits de accesorios decorativos y funcionales tanto para exterior como para interior. El recibimiento por parte del cliente ha sido ejemplar y más del 80 % opta por agregar algún paquete de accesorios.
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