El ser humano es un animal de costumbres. Lo es por sus acciones y también lo es por lo que espera de su alrededor. Para él, la hierba es verde; los plátanos, amarillos; los neumáticos, negros; y el chocolate, espeso. Pero qué pasa cuando le cambias alguna de sus más profundas creencias. Y si incluso le dices que en origen la costumbre era otra. Como cuando se descubre que Papá Noel no iba originariamente de rojo, o que las ruedas de los coches no eran del color que acostumbran ahora. En esos casos le toca hacerse preguntas. Y es que, ¿por qué los neumáticos son negros?
Puede resultar sorprendente que algo que estamos tan acostumbrados a ver haya sufrido un cambio tan importante en su apariencia y no seamos conscientes de ello. Los vemos todos los días, a todas horas, circulando, parados, y no hay duda de que son negros. Pero, si echamos un poco la vista atrás y recordamos algún coche clásico, o volvemos a visionar alguna película del Hollywood clásico nos daremos cuenta de unas líneas blancas que decoraban el lateral de los neumáticos. Sí, estos originariamente eran blancos.
Neumáticos blancos: he aquí la causa
Antes de entrar a comentar por qué ahora los neumáticos son negros, conozcamos por qué en un comienzo eran blancos. La razón es simple y hay que buscarla en la materia prima principal: el caucho.
Este elemento se extraía de un árbol que se encontraba en Brasil, el Hevea Brasiliensis. La manera de extracción es conocida, realizándose sangrando los árboles. La materia que salía de ellos era de un color blanco lechoso. El árbol fue llevado a otros países para evitar que Brasil tuviera el monopolio de algo que iba a ser tan preciado, pero en todos los lugares el caucho que salía seguía siendo blanco.
De esta manera, los neumáticos fabricados a partir de este componente presentaban esa misma pigmentación. Además, el color blanco a veces se resaltaba por la utilización de otros elementos, como óxido de zinc, para aumentar su resistencia. Hasta bien entrada la segunda década del siglo XX lo marciano habría sido encontrar por las carreteras unos neumáticos negros.
Neumáticos negros ¿a qué se debió el cambio?
La razón del color que presentan ahora los neumáticos no hay que buscarla en una cuestión estética sino de seguridad y resistencia. En los años veinte el color negro fue ganando la partida ya que suponía una mejora en las calidades. El causante de este avance era el negro de carbón, un derivado del petróleo que mejoraba la durabilidad y resistencia de las gomas. Esto ya lo hacía el óxido de zinc, pero, debido a la Gran Guerra, este escaseaba porque era empleado para fabricar municiones. El negro de carbón ocupó su lugar y cambió la historia del neumático.
El negro absorbía mejor los rayos ultravioleta, que son los causantes del endurecimiento y agrietamiento de los neumáticos. Además, al ser un elemento que va a estar continuamente en el suelo, en contacto con todo tipo de suciedad, el color negro daba una impresión más limpia que el blanco, que se manchaba fácilmente. Por todo ello, a partir de entonces todo fue al negro.
Aunque, en realidad, el blanco se resistió con fuerza. Como el negro carbón era caro, algunas empresas decidieron poner solo este componente en la parte que estaría en contacto con el piso, dejando los laterales libres de este componente. El resultado fueron unos neumáticos bitono. Lo que fue una decisión meramente económica acabo por resultar en toda una tendencia estética, y la mayoría de marcas empezaron a copiarlo porque los consumidores demandaban esos neumáticos. Muchos coches clásicos serían inimaginables sin esta peculiar apariencia.
Sin embargo, el blanco fue perdiendo importancia progresivamente. Cada vez las líneas de este color iban siendo más pequeñas hasta llegar a desaparecer.
En la actualidad, todavía algunos fabricantes producen estos neumáticos, pero únicamente enfocados al mercado de los coches clásicos. También se pueden encontrar otros colores de neumáticos, especialmente en bicicletas y motos antiguas, o, también, en el reciente Opel Concept GT de 2016. Como se suele decir, las modas siempre vuelven y quién sabe cómo será el neumático del futuro.
Fuente: Ceat, MentalFloss, MuchoNeumático.