Si ya es necesaria la reducción de vehículos de combustión para reducir la emisión de gases de efecto invernadero, en la reducción de las emisiones de carbono en el transporte se necesita redoblar esfuerzos e invertir en investigación más que nunca. Así lo señala el último informe del Monitor Deloitte, Un modelo de transporte descarbonizado para España en 2050, en el que se establecen medidas específicas para conseguir el propósito de reducir las emisiones en más de un cuarto de las emisiones producidas en el año 2014, de 329 MtCO2 a 14 y 88 MtCO2 en 2050.
Además de una mayor promoción de la tecnología 100% limpia en flotas y asociaciones gremiales, el informe apunta la necesidad de invertir en investigación que busque desarrollar vehículos para el transporte de mercancías que no produzcan tantas emisiones de carbono como los actuales. El informe señala una mayor eficiencia energética.
En España, el mayor porcentaje de mercancía se transporta en vehículos pesados (más de 3,5 toneladas) que circulan por carretera, es decir, camiones de gran tonelaje. Es por eso que se hace primordial iniciar la descarbonización en ese transporte en concreto mediante la incentivación del transporte ferroviario eléctrico como se está llevando a cabo en el resto de países europeos. España sigue siendo una excepción en este aspecto. Como se observa en el gráfico siguiente, nos encontramos a la cola de Europa en el uso del tren como transporte de mercancías.
Comparativa internacional de la cuota modal del transporte de mercancías en 2014
Como se puede ver en el gráfico, la utilización del transporte ferroviario para el transporte de mercancías está lejos de ser el principal modelo de movilidad para el comercio. Los camiones eléctricos parecen la mejor opción para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y es por eso que el informe señala de nuevo la importancia de la inversión en desarrollo de tecnología que permita la producción de estos vehículos.
No es que haya falta de investigación en vehículos eléctricos, de hecho Mercedes es una prueba del interés de las compañías en producir vehículos que no produzcan emisiones. La marca alemana anunciaba para este año la salida de 150 camiones eléctricos a prueba después del éxito en 2015 de las pruebas de su primer camión. El último camión llamado Urban eTruck es capaz de transportar hasta 12,8 toneladas de carga útil, lo único que tan solo permite 200 kilómetros de autonomía.
Otra de las soluciones para reducir el número de camiones de combustión es sustituirlos por vehículos de gas natural. En España ya existen 1.500 vehículos de este tipo de transporte que reduce completamente las emisiones de SOx y partículas, y un 40% las emisiones de NOx. Además, el ahorro en el precio del combustible, así como la autonomía de hasta 1500 kilómetrtos, hacen de esta propuesta la más atractiva para el bolsillo de los usuarios de este transporte.
Sin embargo, la escasez de infraestructura de repostaje y el hecho de que no elimina las emisiones de gases de efecto invernadero por completo, posicionan esta medida por debajo de otras más atractivas a ojos del medio ambiente.
Además de los camiones, el autobús urbano se coloca en el punto de mira del informe. Muchas ciudades han comenzado ya a descarbonizar su flota de buses de ciudad, pero todavía queda mucho trabajo por hacer. La inversión saldría rentable al final ya que supondría un ahorro a largo plazo de hasta 10,5 millones de euros al año si todos sus autobuses públicos fueran eléctricos, según el informe de 2015 realizado por Volvo y la auditoría KPMG.
Fuente: Deloitte