En numerosas ocasiones hemos hablado de la importancia de realizar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) en el plazo establecido. Es un trámite obligatorio para todos los coches que estén en circulación y circular sin ella puede acarrear una multa. Aunque también se ha registrado el caso de algunos usuarios que ponen la pegatina de la ITV de otro coche que sí que la ha pasado. Como cabría esperar, esta acción es totalmente ilegal y el Tribunal Supremo se ha pronunciado al respecto.
Se trata de un caso que ha salido a la luz recientemente en el que un usuario llevaba en el parabrisas de su coche una pegatina de la ITV con fecha de validez de septiembre de 2019. Las autoridades se dieron cuenta de que no pertenecía a dicho vehículo, que en realidad tenía caducada la ITV desde mayo de 2016. Ya no solo se impone la multa por no haber pasado la inspección, sino que también se considera como un delito de falsedad.
Cuando fue sancionado, el usuario recurrió al Tribunal Supremo considerando que dicha pegatina no era un documento oficial ni una certificación y no consideraba justa la multa de 720 euros que se le había impuesto. Sin embargo, el Supremo resolvió que la pegatina de la ITV puede tener consideración de documento oficial o de certificación a los efectos de los delitos de falsedad descritos en los artículos 390 y siguientes del Código Penal.
No hay que olvidar que el acusado la utilizaba «con un fin falsario y con el objetivo de no ser sancionado por tener la ITV caducada». Así que utilizarla así vulnera varios artículos del Código Penal y se sanciona como se había indicado inicialmente. De esta forma queda aún más claro que no se puede usar la pegatina de la ITV de un coche que la haya pasado en un coche que no. En ningún caso merece la pena, ya que la multa por circular sin ITV es menor que esta por falsedad de documentos. Aunque ante todo, dejar claro que lo importante es tener la inspección pasada y el coche en perfecto estado para circular.