Audi presenta en el Salón del Automóvil de Detroit su segundo prototipo con el nombre de e-tron. Con el anteriormente presentado comparte el sistema de propulsión de tipo eléctrico. Técnicamente son diferentes y también en lo que a tamaño se refiere.
El e-tron 2010 tiene dos motores eléctricos que funcionan independientemente y que suman un total de 204 CV de potencia. De esta manera, cada una de las mecánicas puede transmitir una fuerza diferente a la rueda a la que va acoplada. La velocidad máxima de este prototipo está limitada a 200 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 5,9 segundos.
El e-tron lleva una batería de iones de litio que va situada en entre las plazas delanteras y las ruedas traseras. En el ciclo homologado de consumo europeo ofrecen una autonomía de 250 kilómetros. Para su recarga hay que conectarla a una toma de corriente bien como la que hay en las casas, bien a una de mayor intensidad. En el caso de la red doméstica, el tiempo de recarga será de 11 horas mientras que en redes con mayor intensidad tan sólo llevará dos horas.
Su carrocería tiene una longitud de 3,93 m y una serie de modificaciones aerodinámicas para que la resistencia al aire sea menos. Hay entradas de aire en el frontal y detrás de las puertas que normalmente van cerradas.
La estructura de este Audi es de aluminio y pesa 1.350 kg. Los paneles exteriores son de plástico reforzado con fibra de carbono, una técnica que la marca utilizará pronto en próximos modelos. Para las funciones de los faros se han utilizado diodos luminosos. En el parabrisas hay una cámara que reconoce las condiciones ambientales y de tráfico que hay en cada momento. En función de la información que recoge, el haz de luz se adapta a cada situación. Este sistema también está conectado con el navegador y en ciertos casos, como si se llega a un cruce, se enciende automáticamente el alumbrado lateral.
El conductor puede consultar algunos datos del e-tron mediante un teléfono móvil y siempre que esté a una cierta distancia. Se puede saber si las ventanillas están cerradas, el estado de la batería o planear una ruta en el navegador. Cuando el coche se pone en marcha, la palanca de cambios emerge de la consola central. Una vez dentro, se pueden manejar ciertas funciones mediante mandos táctiles. Para calentar el habitáculo, este Audi lleva una bomba de calor ya que las baterías no desprenden suficiente calor como para calentar el habitáculo.