Los tiempos cambian y hay muchos modelos que se han ido perdiendo con el paso de los años. Si miramos atrás es fácil ver la tendencia a desaparecer de algunos monovolúmenes de renombre que habían sido la opción ideal para familias en las pasadas décadas. Sin embargo, ahora están en horas bajas debido al auge de los SUV. Un ejemplo muy visual de esta tendencia es el Renault Scenic Vision, un prototipo acaba de ser presentado y que deja clara la visión de futuro que tiene la marca francesa.
El Renault Scenic desapareció hace no mucho debido a ese cambio de paradigma, solamente queda la versión de siete plazas, Grand Scenic. Aunque parece que el modelo no va a caer en el olvido, pues su denominación se mantiene en este concept que pretende marcar la hoja de ruta para los vehículos familiares en los próximos años. Con el objetivo de conseguir la neutralidad de carbono para 2040 en Europa y para 2050 a nivel mundial, presentan este innovador ejemplar que tiene tres pilares en su concepción: medio ambiente, seguridad e inclusión.
El diseño del Renault Scenic Vision tiene reminiscencias del nuevo Mégane E-Tech, de hecho, adelantará a un modelo de producción que llegará en 2024. Aunque lo más llamativo del prototipo es su nivel de innovación en materia de economía circular. Porque está hecho en más de un 70 % de materiales reciclados y es reciclable al 95 %, incluyendo su batería. Por poner algún ejemplo, el piso del coche se hace con residuos de plástico procedente de botellas de leche y tubos de plástico.
Se trata de un ejemplar de dimensiones considerables, pues tiene una longitud de 4.490 mm, una anchura de 1.900 mm, una altura de 1.590 mm y una distancia entre ejes que se va hasta los 2.835 mm. Llama la atención un interior muy futurista y minimalista. Seguramente su diseño varíe en su llegada a mercado, pero la noticia es que abandona el uso del cuero y se sustituye por poliéster reciclado. Además, el depósito de la pila de combustible está fabricado con fibra de carbono procedente de residuos de papel reciclado.
Porque sí, el Renault Scenic Vision cuenta con un sistema de propulsión híbrido capaz de funcionar con electricidad y con hidrógeno de forma simultánea. Este sistema recibe el nombre de H2-Tech y cuenta con un motor eléctrico de 160 kW, además de una pila de combustible de 16 kW que actúa como generador. De esta forma, les permite tener una batería de apenas 40 kWh de capacidad para conseguir una autonomía muy generosa que podría rondar los 800 kilómetros.
Consigue reducir su huella de carbono un 75 % respecto a un eléctrico convencional y presume de algunas tecnologías novedosas. Mejora la calidad del aire a través de un filtro situado en la puerta del conductor y de los pigmentos negros de su pintura. Por no hablar del sistema de cámaras que permite ampliar el campo de visión del conductor en un 24 %, de la apertura con reconocimiento facial o del sistema de sonido ultrapersonalizado gracias a los micrófonos y altavoces de cada asiento.
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