Como ya comentamos en otra entrada, en la que detallábamos la colección de coches que tenía el actor Paul Walker con su compañero y piloto, Roger Rodas. El año pasado ya se rumoreaba la venta del Nissan Skyline GT-R R34 que salió en la cuarta entrega de la saga de A todo gas en el año 2009. Un Skyline potenciado que, ahora sí, se pone a la venta, con un precio mínimo de 750.000 euros.
Centrándonos en primer lugar en las características técnicas, es obvio que el actor no se movía en las películas con una versión estándar. De hecho, en la segunda entrega de la película el Nissan Skyline que usaba el actor, era la versión básica, un GT-T (no, no se trataba del GT-R), pero en la cuarta película se dejaron de tonterías y decidieron preparar bien este godzilla.
No hacen falta muchas modificaciones para que esta bestia supere los 500 CV. Es normal encontrarse con algunos que superen los 800 CV de potencia, ya que es un coche muy seguido y respetado en el mundo de la competición. En este caso, las modificaciones no han sido muy radicales pero hacen que este 2,6 litros de seis cilindros en línea alcance los 550 cv de potencia. El motor en concreto se llama RB26DETT, al cual se le ha mantenido el sistema biturbo, en lugar de incorporar un solo turbo grande como suelen hacer las preparaciones. De mecánica solo lleva mejoras electrónicas (centralita reprogramable) y se le ha incorporado un intercooler frontal más grande, para que refrigere bien el aumento de presión de los turbos.
Por otro lado, las mejoras que se le han incorporado están relacionadas al chasis. Incorpora un arco de seguridad hecho a medida, para incrementar la seguridad y ofrecer una mayor rigidez al chasis, así como diversas barras de refuerzo de torretas (zona superior de las suspensiones delanteras). Además, se ha incidido en el sistema de frenos con un kit de la marca Rotora, con unas pinzas delanteras de seis pistones, que son capaces de detener el coche en el momento que se pise el pedal del freno. El aspecto negativo es que su sistema de suspensiones es un poco flojo, tan solo incorpora unos muelles de la marca Nismo. No es una mala opción, pero no están a la altura que requiere el godzilla.
Por supuesto que se han modificado ligeramente el aspecto estético, con un añadido de carbono en el paragolpes delantero de serie y el capó de la versión limitada del GT-R R34 Z Tune. También equipa unas llantas más grandes, de la marca Volk Racing.
Tan solo hacen falta estas pequeñas modificaciones para que este deportivo japonés rinda a niveles de un superdepotivo italiano. Paul Walker sabía lo que hacía, pues son las modificaciones justas y necesarias para que este coche sea perfecto. Por el contrario, con la popularidad de la sagaFast and Furious, y si a eso le añadimos el trágico accidente que dio de hablar, este coche se ha revalorizado bastante.
La venta se llevará a cabo en un precio estimado entre 750.000 hasta los escalofriantes 5 mllones de euors. Vale que apenas cuenta con 6.000 km en su haber, pero es una barbaridad, sobre todo si tenemos en cuenta que este coche con estas modificaciones puede encontrarse por menos 80.000 euros… Ya ves el caché que puede dar aparecer en la gran pantalla y convertirse en todo un icono del cine y automovilístico.
Fuente: Classis Trader