Toyota y el Hospital Kumamoto de la Cruz Roja en Japón desarrollarán la primera clínica móvil del mundo propulsada por pila de combustible de hidrógeno, cuya puesta en escena está prevista para verano de 2022. Con este proyecto, ambas entidades proponen demostrar la eficacia de los vehículos eléctricos de pila de combustible (FCEV) en el campo de la medicina y las medidas de respuesta ante desastres, así como contribuir a lograr una sociedad neutra en carbono.
Toyota y el Hospital Kumamoto comenzaron a trabajar conjuntamente tras identificar una mayor frecuencia de tifones en los últimos años, lo que aumentó la necesidad de servicios médicos en las áreas afectadas por los desastres. Para contrarrestar esto, una clínica móvil de hidrógeno podría usarse para brindar servicios médicos durante tiempos de paz y para apoyar los esfuerzos de socorro en casos de desastre, mientras se suministra electricidad en las zonas dañadas por el desastre como parte de una contrarrespuesta.
Como tal, Toyota ha desarrollado la clínica móvil FCEV sobre la base de su minibús Coaster, y ha utilizado como fuente de energía el sistema de pila de combustible del Mirai, el primer vehículo eléctrico de pila de combustible de hidrógeno producido en serie en el mundo. En carretera, presenta un rendimiento medioambiental superior, sin emisiones de CO2 ni otras sustancias nocivas −únicamente emite vapor de agua por el sistema de escape−, al tiempo que ofrece una experiencia al volante sin apenas ruidos ni vibraciones.
Además del transporte de emergencia de pacientes, tanto Toyota como la Cruz Roja local creen que la clínica móvil de pila de combustible de hidrógeno tiene el potencial para una amplia gama de aplicaciones y desarrollos en el campo de la sanidad, incluido el suministro de electricidad a los autobuses de donación de sangre y vehículos de exámenes médicos que viajan a áreas menos pobladas. Todo gracias a varias tomas de corriente auxiliares de 100 VCA (Voltios de Corriente Alterna) por dentro y por fuera del vehículo.
Asimismo, el minibús de cero emisiones de Toyota también está equipado con un sistema de alimentación CC externo que proporciona un suministro energético de gran potencia y capacidad: 9 kW de potencia máxima y unos 90 kWh de capacidad de suministro. A bordo, el vehículo combina el aire acondicionado con un sistema de escape y un filtro HEPA4 que mejoran el control de infecciones para los ocupantes. Ambas entidades están seguras de que tienen la capacidad de crear un nuevo valor que no existe actualmente.
Las pruebas piloto aspiran a alcanzar un suministro energético apto en caso de catástrofe, con vistas a un aprovechamiento efectivo de la capacidad de suministro del bus en servicios médicos y en zonas afectadas. En lo que respecta al Toyota Coaster de base, con 7.160 mm de longitud y 5.670 kg de peso máximo, tendrá una velocidad máxima de 100 km/h y una autonomía de aproximada de 210 kilómetros gracias a sus tres depósitos de hidrógeno de alta presión con 7,2 kg de almacenamiento cada uno tomados del Mirai.
Fuente: Toyota