Una fotografía perfecta a más de un kilómetro de distancia. Una imagen captada a más de 300 km/h completamente nítida. Suena bien, ¿verdad? Actualmente, existe una cámara fotográfica que puede conseguir hacer realidad estas increíbles virtudes… siempre que pases delante de ella en coche. Veloláser tiene un nuevo compañero de recreo y se llama TruCAM II, el radar más compacto y avanzado del mercado.
La Dirección General de Tráfico (DGT) continúa y continuará persistiendo en su lucha contra las imprudencias al volante. Desarrollado por Tradesegur, el TruCAM II hace parecer enorme al ya de por sí compacto Veloláser. Apenas mide 210 milímetros de largo, 98 mm de ancho y 370 mm de alto, frente a los “menos de 50 centímetros” de altura del que hasta ahora ostentaba el podio. Además también es más ligero, con 1,6 kilos frente a los tres del Veloláser.
Pero que su pequeño tamaño no te haga subestimarlo. El radar TruCAM II es capaz detectar excesos de velocidad a una distancia de hasta 1.200 metros en los dos sentidos. En comparación, el helicóptero de Tráfico, Pegasus, puede detectar una infracción en carretera en un radio de 1.000 metros. Apodado con cierta lógica como el “superradar”, lo cierto es que este nuevo cinemómetro puede tomar imágenes de alta definición entre los 15 y 150 metros.
Y es que el objetivo del TruCAM II no es otro que acabar con el “truco” que muchos conductores aplican a diario: quienes saben la localización exacta del radar, levantan el pie para adecuarse a la velocidad límite de la vía y, tras rebasarlo, vuelven a pisar el acelerador para continuar con su viaje al ritmo que deseen. El nuevo radar, el cual se puede instalar distintos soportes como trípodes y coches patrulla, puedes, literalmente, recibir una multa sin que lo veas.
También es cierto que existe la creencia popular de que los radares, a partir de cierta velocidad, no pueden captar con claridad al infractor. Es una verdad a medias, pues has de ser increíblemente inconsciente y rápido para conseguir tal efecto. El TruCAM II es eficaz a velocidades de hasta 320 km/h y su margen de error es de tan solo 2 km/h. Para llevar a cabo las mediciones, el dispositivo realiza hasta tres mediciones de velocidad por segundo.
En cuanto a su autonomía, la batería de iones de litio –de capacidad desconocida– es capaz de operar por un tiempo que oscila entre las ocho y diez horas. Puede detectar diferentes tipos de vehículos, funcionar por la noche y hasta captar imágenes del interior de los coches para detectar otras posibles meteduras de pata. También trabaja bajo lluvia y en condiciones cuyas temperaturas oscilen entre los 10 y 60 grados centígrados.
Por el momento, los únicos que tienen en activo un radar TruCAM II corresponden a las dos unidades que utiliza la policía local de Granada. Es de esperar que en el próximo concurso público de compra de radares, el nuevo modelo de Tradesegur sea una de las opciones mejor consideradas. Pere Navarro, director de la DGT, tiene que estar entusiasmado con la llegada de este “superradar”.