El Citroën C3 es uno de esos coches que estaba llamado a hacer algo grande. Ser el sustituto del Saxo en 2002 hizo que la responsabilidad pesara sobre su espalda. Sin embargo, el pequeño utilitario francés nunca se amedrentó. La prueba es que dos décadas después y con más de 5,6 millones de unidades vendidas sigue en el mercado.
Por el camino ha dado vida a otras carrocerías como el C3 Picasso o el actual C3 Aircross, pero vamos a centrarnos en el utilitario. Porque hemos venido a Austria a conocer a la cuarta generación del modelo, que es una de las evoluciones más notables que hemos visto en los últimos tiempos.
El objetivo es el de superar el millón de unidades que se vendieron de la tercera generación y la fórmula a seguir era clara. Había que adoptar una plataforma nueva, que fuera más aprovechable y que tuviera la electrificación como protagonista. Optaron por la Smart Car Platform de Stellantis, esa misma que va a dar vida a siete modelos de varias marcas y que destaca por su nivel de eficiencia. Eso se traduce en la llegada de un Citroën ë-C3 que parte de 23.800 euros y que se posiciona como el eléctrico barato prometido por la marca. También hay combustión a una tarifa reducida a 14.990 euros.
Exterior
El exterior cambia mucho en esta nueva generación del Citroën C3. Se aleja de las formas redondeadas que tuvo en sus inicios y apuesta por una imagen más moderna y llamativa. Se inspira en el prototipo Citroën Oli de 2022 y comienza con un frontal elevado y anguloso. Monta el nuevo logotipo ovalado, que es la nueva representación de los chevrones y ocupa un lugar privilegiado en el centro de la calandra. Se refuerza con rejillas en negro y también con una firma lumínica en tres niveles gracias a esos faros formados por una lente vertical y dos horizontales que recuerdan a unas aspas.
Este modelo se ofrece en cinco colores de carrocería, pudiendo elegir entre Blanco Polar, Azul Montecarlo, Rojo Elixir, Gris Mercurio y Negro Perla Nera. En el acabado superior se puede optar por la carrocería bitongo para tener el techo en blanco o en negro. También son distintivas las llantas diamantadas de 16 y 17 pulgadas, que tienen un diseño llamativo. Desde la vista lateral se puede ver cómo afecta la nueva plataforma a través de esos voladizos tan cortos.
La trasera del C3 sigue con el chorreo de personalidad y tiene surcando el portón una tira decorativa horizontal de color negro brillante que se inspira en los chevrones del frontal. Aquí también hay presencia del nuevo logotipo ovalado y aparecen unos pilotos traseros que hacen el mismo juego que los delanteros con dos lentes horizontales y una vertical. En la parte inferior se despliega un paragolpes ensanchado que busca favorecer la aerodinámica gracias a su forma recordada en las esquinas.
El Citroën C3 mide 4,01 metros de longitud, 1,57 metros de altura y 1,76 metros de anchura. Esto supone que sea 19 mm más largo, 6 mm más alto y casi 10 mm más ancho que la versión saliente. También presume de una distancia libre al suelo que llega hasta los 16,3 cm para ser bastante mayor a la del anterior.
Interior
El interior del nuevo Citroën C3 ha sido bautizado como C-Zen Lounge. Es la forma que tiene la marca para hablar de la reinvención de su salpicadero, que es totalmente horizontal para mejorar la visibilidad de losusuarios y que está flanqueado por las salidas de aire verticales típicas de la marca. También está dividido en dos niveles.
En el superior vemos la ausencia de cuadro de instrumentos tradicional, que ha sido sustituido por una especie de Head-Up Display que no deja de ser una instrumentación estrecha y clásica, que parece que une salpicadero con parabrisas para que el conductor no se despiste. Se controla desde un volante multifunción, que es más pequeño y fácil de utilizar.
Lo que no cambia es que lleva una pantalla táctil central de 10,25 pulgadas para controlar el resto de funciones. Como es habitual, se da mucha importancia al smartphone y la conectividad es completa gracias a Android Auto y a Apple CarPlay sin cables.
Mencionar que no está disponible de serie y que en otros ejemplares se encuentra un soporte para el teléfono móvil con una aplicación específica. Comentar que los controles de la climatización son analógicos y eso siempre se agradece. También que puede llegar los asientos Advanced Comfort de la marca, que tiene una espuma suplementaria para mejorar la comodidad del usuario.
Las plazas traseras son las grandes beneficiadas del aumento en dimensiones del Citroën C3. Aunque ha sido ligero, la verdad es que se nota dentro por la redistribución del habitáculo, que resulta en unas plazas más capaces. En los laterales los usuarios de hasta 1.80 metros podrán entrar con garantías gracias a un hueco para la cabeza suficiente y uno para las piernas que es generoso. Sigue pecando de anchura, por lo que es mejor viajar cuatro adultos que cinco en este pequeño utilitario.
Maletero
El maletero del Citroën C3 tampoco está mal teniendo en cuenta ese tamaño reducido y que está por debajo de la media. Tiene una capacidad de 310 litros, que es el mismo en todas las versiones, incluyendo la eléctrica. Vemos unas formas bastante aprovechables y solamente podríamos quejarnos de que la boca de carga queda a una altura considerable. Por lo demás, tiene iluminación, ganchos para fijar la carga y la posibilidad de abatir los asientos traseros en dos partes para llegar a superar los 1.000 litros de capacidad.
Motor
El Citroën C3 se asienta sobre la Smart Car Platform y eso significa que la electrificación ha sido la base. Tiene esta plataforma pensada para sistemas de propulsión eléctricos, aunque también puede llevar mecánicas de gasolina. El de acceso es el 1.2 Turbo de tres cilindros, que ofrece 100 CV de potencia y va ligado a una caja de cambios manual de seis velocidades. Es el único con etiqueta C, pues por encima estaría el Hybrid 100 con etiqueta ECO. Porta la misma mecánica de tres cilindros, aunque con un sistema microhíbrido de 48 V para hacerlo más eficiente. Tiene los mismos 100 CV, pero va ligado a la transmisión automática de doble embrague ë-DCS6 que lleva acoplado un pequeño motor eléctrico de 21 kW.
Por la parte del eléctrico, el ë-C3, tiene un motor de 113 CV que es bastante aprovechable. Va ligado a una batería LFP de 44 kWh y eso le permite conseguir una autonomía de 320 kilómetros. Se podría cargar en corriente continua a 100 kW de potencia para pasar del 20 al 80 % en 26 minutos, aunque también puede cargarse en corriente alterna. En una toma monofásica a 7 kW tardaría poco más de 4 horas y en toma trifásica a 11 kW lo haría en 2 horas y media. El eléctrico hace el 0 a 100 km/h en 11 segundos y está limitado a 135 km/h. Más adelante llegará otra versión de acceso con batería más pequeña y 200 km de autonomía.
Comportamiento
Nos ponemos al volante del Citroën C3 más barato de todos, de la versión de acceso que lleva un motor bien conocido por todos. Se trata del 1.2 Turbo de tres cilindros que tanta polémica ha generado en la marca. Se trata de una renovación con algunos refuerzos para no tener los problemas que le asolaron en el pasado.
Es un bloque ideal para un vehículo pequeño como el que nos atañe, pues desarrolla una potencia de 100 CV y 205 Nm. No hay más potencia ni para quien la quiera en combustión, pues el Mild Hybrid tiene el mismo nivel. Solamente se podría optar por el eléctrico con 113 CV, pero no sería la mejor opción para viajar teniendo en cuenta la autonomía.
Tampoco es negociable la caja de cambios manual de seis velocidades, para optar a automático habría que irse a por el Mild Hybrid. No es una mala transmisión, le sienta bien al conjunto y es la opción más simple. Lógicamente, las prestaciones no van a ser nada del otro mundo, pues el C3 de acceso acelera de 0 a 100 km/h en 10,6 segundos y su velocidad máxima está limitada a 160 km/h. También habría que decir que en su ficha técnica homologa un consumo de 5,6 l/100km.
Durante nuestra ruta por los alrededores de Viena lo cierto es que los datos no se alejaron demasiado de la realidad. Sacamos una media de 6,3 litros, siempre teniendo en cuenta que es un terreno bastante llano y que no hubo apenas autopista durante la ruta. En todo caso, vemos que el Mild Hybrid podría marcar la diferencia en ese aspecto. Promete un consumo y unas emisiones un 10 % por debajo, y sobresaldrá en la ciudad. Allí, afirman que podrá estar alrededor del 50 % del tiempo moviéndose en modo eléctrico y eso a la larga podría hacer que se redujeran aún más los consumos finales.
Por primera vez, el C3 monta la suspensión Citroën Advanced Comfort. Eso significa que tiene los amortiguadores hidráulicos progresivos que tanto hemos alabado en otros modelos de la marca. De hecho, nos atreveríamos a decir que se ha convertido en el más confortable de entre todos los utilitarios gracias a esa amortiguación en dos gases.
Cuando sea un bache ligero funciona como otros sistemas, pero ante impactos más grandes se utilizan los topes hidráulicos para absorber mejor la energía y que no moleste a los ocupantes.
La verdad es que tras haber conducido el C3 en esta toma de contacto, nos queda aún más claro de que se trata de un urbanita puro. Es un coche ideal para ciudad gracias a ese confort en marcha y también a la facilidad de conducción. La dirección está muy filtrada, pero ayuda a las maniobras, un punto en el que destaca gracias a su radio de giro de 10,6 metros.
También decimos lo de que se siente como pez en el agua en la ciudad porque su limitada potencia hace que no se sienta del todo cómodo fuera de ella. Acepta viajes esporádicos, pero sufrirá cuando vaya cargado hasta los topes con cuatro adultos.
Opinión coches.com
No es de extrañar que el Citroën C3 sea el modelo más popular de la marca y un auténtico superventas en Europa. Es un ejemplar que ahora se reinventa por completo para ser el primer utilitario que ha sido diseñado como eléctrico y que se adapta también a la combustión para aquellos que todavía no estén preparados para dar el salto.
En todo caso, el C3 ha buscado ofrecer la máxima calidad-precio al cliente, de ahí que el eléctrico sea de los más baratos que podemos encontrar actualmente en el mercado y llegará en 2025 otro con menos capacidad por 20.490 euros. Por no hablar de ese gasolina, que está algo por debajo de la media del segmento gracias a los 14.990 euros.
- Opciones mecánicas aprovechables
- Confort en marcha
- Precio de partida bajo
- Falta de algunos elementos
- Calidad justa
- Gama mecánica completa
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