Si hay un sector que debe potenciarse antes que ninguno, ese es el de las furgonetas eléctricas. Son los vehículos que más kilómetros recorren, sobre todo en ciudad debido al auge de la compra online. De ahí que sean imprescindibles para lograr urbes con el aire limpio. Cada vez hay más variantes, de fabricantes de toda la vida o nuevos, como, por ejemplo, la Maxus eDeliver 3.
Maxus no es una marca nueva. Como te contamos en la prueba del Maxus eDeliver3, el nombre lo ha rescatado SAIC, primer fabricante de vehículos chino, como marca global para sus veh´ículos industriales: Viene del modelo LDV Maxus, de los britanicos Leyland. Y tras conocerla a fondo y movernos bastante con ella durante seis días, hemos visto que está lejos de lo que uno encuentra en un bazar.
Su arma principla para conquistar a las empresas de reparto es una buena capacidad de carga y un consumo eléctrico muy bajo. Son sin duda las dos cosas que un gestor de flotas busca. Obviamente, tiene algunos defectos de juventud. Y es que sus rivales europeos tratan mejor al trabajador que pasa en cabina más horas. Les ofrecen más espacios para llevar objetos con tapa cerrada y soluciones prácticas. Y un repaso a la ergonomía de mandos no le vendría mal, pues muchas cosas podrían controlarse desde el volante.
En marcha, pues poco que ver con un turismo, pero tampoco lo pretende. Y no es barata (tampoco lo es un iPhone fabricado en China), pero sí es cierto que si observas precios de furgonetas con este sistema de propulsión de marcas europeas, tiene un precio de partida algo más bajo. Si se hace uso de las ayudas del Plan Moves III y los recorridos diarios son siempre parecidos, puede ser interesante.
Galería de fotos: