Una vez que sabes la marca y el modelo de coche que te gusta, surge la eterna duda, ¿elijo motor diésel o gasolina? Dependerá del uso que vayas a hacer del coche, de los kilómetros que hagas al año y de algunos otros factores que te vamos a explicar a continuación.
Para empezar, los motores de gasolina tienen una mecánica más sencilla que los diésel. Vibran y suenan menos, son más fiables y su precio, respecto a un diésel de similar potencia, es unos 1.500 euros más barato. Esto tiene una contrapartida que seguro que conocerás, su consumo es superior.
Un motor diésel, frente a un gasolina de potencia parecida, consume entre un 15 y un 20% menos gracias a su sistema de inyección mucho más preciso. Trabajan a muchísima presión: hasta 2.000 bares frente a los seis bares de un gasolina tradicional… pero esto los convierte en coches menos fiables. Hoy en día todos los diésel tienen turbo, así que sus prestaciones son equiparables a las de los gasolina, aunque ofrecen una respuesta más contundente por debajo de 3.000 rpm.
Otro factor que debes tener en cuenta es que, cuanto más grande y pesado sea el modelo de coche que compres, más te interesará que sea diésel. A igualdad de potencia, su ventaja en consumo respecto al gasolina crece exponencialmente. Así, los monovolúmenes, todoterrenos grandes y berlinas de lujo interesan más con motor diésel que un coche urbano, en los que el gasóleo no aporta tanta ventaja.
Al hilo de esto, debes saber que los trayectos cortos penalizan a los motores diésel. Son motores más robustos, consumen menos, tienen un mejor rendimiento térmico (pierden menos calor) y tardan más en calentarse. Esto afecta tanto al desgaste del motor como al confort y seguridad de los ocupantes en zonas de clima frío, porque la calefacción tardará más kilómetros y tiempo en actuar que en un motor de gasolina. Incluso en algún modelo la calefacción necesita un refuerzo eléctrico. Si vas a usar el coche mucho en invierno o tus trayectos suelen ser breves, deberías elegir motor de gasolina.
No hay un kilometraje fijo a partir del cual se pueda decir que un diésel es rentable. Se suele decir que si realizas más de 20.000 km/año: te interesa un diésel, porque su bajo consumo te permitirá amortizar en unos tres o cuatro años los 1.500 euros que, de media, cuesta de más frente a uno de gasolina.
La revista Autofácil afirma también que si recorres unos 15.000 km/año es mejor elegir el gasolina cuando la diferencia de precio entre el motor diésel y el gasolina es de 1.200 euros o más y si haces 10.000 km o menos: elige el de gasolina… a no ser que el diésel equivalente te salga apenas 500 euros más caro (para modelos de unos 15.000 euros).
Como decíamos, no hay un kilometraje fijo a partir del cual se pueda decir que un diésel es rentable, pero sí una fórmula muy sencilla para calcular la rentabilidad del diésel en función de la diferencia en el precio de adquisición y en el consumo. Es tan sencillo como aplicar la siguiente fórmula:
Parece complicado, pero no lo es tanto:
• PCD = Precio del coche diésel.
• PCG = Precio del coche gasolina.
• CmG = Consumo medio del coche de gasolina.
• CmD = Consumo medio del coche diésel.
• PG = Precio del litro de gasolina.
• PD = Precio del litro de diésel.
El resultado de la fórmula es el kilometraje a partir del cual empezaríamos a ahorrar con el diésel. Hasta ese momento, el menor consumo del diésel no compensaría el precio superior a la hora de la compra.
Te lo vamos a poner todavía más fácil. Si no quieres aplicar la fórmula tú mismo, existen muchas páginas en internet que ofrecen sus propias calculadoras gasolina-diésel, aunque no todas son igual de fiables. Una de las más completas y sencillas de utilizar es la que ofrece arpem.com
Otras variables que deberías tener en cuenta son:
- La diferente depreciación: todavía se cotizan más de segunda mano los diésel que los gasolina
- Las posibles diferencias en mantenimiento: Son cada vez menos, sobre todo si comparamos un diésel con uno de los nuevos motores de gasolina que también tienen turbocompresor y sistema de inyección directa. Sin embargo, frente a un gasolina atmosférico, los diésel todavía son más caros de mantener… Y gastan más rueda.
- La diferencia en el precio del seguro, que existe. Usa nuestro comparador de seguros para ver cuánto en función del modelo que buscas.
¿Qué depara el futuro?
Hace poco hablamos de lo que le depara el futuro al motor diésel y las previsiones no eran demasiado optimistas. Después de algunos escándalos como el Dieselgate y de que las autoridades se hayan fijado el objetivo de reducir las emisiones NOx, parece que el diésel tiene fecha de caducidad. Todavía no es pronto para decir cuanto, pero los resultados en ventas no se han hecho esperar y la gasolina ya superó al diésel por primera vez en la última década.
También hemos visto cómo algunas marcas dejaban de apostar por este combustible o lo relegaban a algunos modelos. Fiat o Porsche han sido algunos de los últimos en pronunciarse y podrían abandonarlo a medio plazo. Por otro lado están las restricciones en las grandes ciudades, que afectan tanto a gasolina como a diésel, pero que suelen ser más estrictas con el segundo grupo. En un futuro se podría prohibir la entrada a todo combustible fósil, pero es algo que se comenzará a aplicar más a largo plazo.