MirrorLink era ese sistema de tecnología que se diseñó para permitirnos acceder de forma segura a las funciones de información, entretenimiento y comunicación del teléfono móvil mientras conducimos. MirrorLink, fue en pocas palabras lo que conocemos como Apple CarPlay y Android Auto sistemas más versátiles y accesibles para todos y que son hoy por hoy nuestra interfaz de conexión con nuestro coche. En los albores de la conectividad, MirrorLink llegó a nuestras vidas como una interfaz de código abierto para que cada marca pudiese bichear y adaptar este sistema creado por Nokia a cada coche.
El sistema MirrorLink se introdujo por primera vez en 2011 como una iniciativa de la Car Connectivity Consortium (CCC), una asociación de fabricantes de automóviles y empresas de tecnología y perseguía el objetivo de proporcionar una solución estandarizada para la integración de smartphones en los sistemas de infoentretenimiento de los automóviles. Vamos a recordar que lo hacía especial y en qué ha terminado todo esto de «enchufar el teléfono al coche».
La historia de MirrorLink
Como buen software, del que ya conocemos su origen, las actualizaciones y mejoras lo hicieron crecer y sentar las bases y estas actualizaciones de MirrorLink fueron introduciendo diversas mejoras para hacerlo un sistema más completo y capaz. Desde sus inicios, se trabajó en mejorar la calidad de la transmisión de datos y la velocidad de respuesta táctil. Además, se fueron añadiendo funciones avanzadas de aplicaciones, como el control de música, navegación y acceso a notificaciones sin distracciones durante la conducción, como véis, estas mejoras se centraban en la rapidéz y en la experiencia de usuario.
A medida que la tecnología MirrorLink avanzaba, esta se alineó con estándares de la industria y colaboró con otras tecnologías de infoentretenimiento para automóviles, como Apple CarPlay y AndroidAuto. Esto permitió una integración más fluida y proporcionó a los conductores opciones más amplias según sus preferencias de dispositivo móvil. No es que los hijos matasen al padre, simplemente, que al ser una tecnología de código abierto, las grandes tecnológicas la mejoraron y la hicieron suya para poder ampliar su catálogo de servicios conectados a sus usuarios, el resto es historia como sabes. En materia de seguridad, hay que mencionar que esta siempre ha sido una preocupación clave para los desarrolladores de MirrorLink.
A lo largo de las actualizaciones, éstas se fueron implementado en base a medidas para proteger la información del usuario y garantizar que la interacción con el sistema de infoentretenimiento sea segura mientras se conduce introduciendo desde mejoras de seguridad para los usuarios como protocolos de sistemas activos y pasivos como el reconocimiento de señales en los mapas o las pausas de usos prolongados que hacían que apartásemos la vista de la carretera.
Los pioneros de la conectividad
En este punto, tenemos que decir que la adopción e inclusión de MirrorLink por parte de muchos fabricantes ha sido significativa en nuestros desplazamientos, con fabricantes que incorporaron en su momento esta tecnología en una amplia gama sus vehículos. En su momento hubo docenas de miembros del consorcio, y entre los fabricantes de automóviles más populares destacan Stellantis, Honda, Mazda, Mercedes-Benz, Subaru y el Grupo Volkswagen. Y entre los fabricantes de teléfonos móviles tenemos a HTC, Huawei, LG, Samsung y Sony, mientras que marcas como Alpine, Bosch, Clarion, Denso, Harman, Panasonic y Pioneer presumían de estar entre los miembros participantes que fabrican el hardware multimedia para coches.
En aquel momento y con una gama tan amplia de marcas y de hardware compatible con MirrorLink, el sistema aportó varias ventajas sobre los sistemas de Apple o Android. El enfoque del código abierto significó realmente que cualquier desarrollador que haya en el mundo puede solicitar la aprobación de nuevas aplicaciones para MirrorLink. Si tu, desarrollador del momento, cumplías con los estándares “CCC”, podías certificarte para el uso y explotación del sistema, aportando tu visión y mejoras para que el resto de usuarios pudiese hacer acopio de tu visión del MirrorLink.
¿Cómo funcionaba Mirror Link?
Que tiempos aquellos… este sistema era fácil a más no poder: lo primero era asegúrarse de haber descargado las aplicaciones compatibles de turno con MirrorLink en el móvil, cosa que también puedes mirar desde su web. Luego, una vez dentro del vehículo, nuestro teléfono debía estar conectado al sistema de a bordo MirrorLink mediante un cable de conexión al puerto USB o por Bluetooth. Si tu coche disponía de varios sistemas de conexión telefónica instalados, como por ejemplo CarPlay y MirrorLink, es posible que debieses acceder a la configuración del coche y seleccionar el sistema que quieres usar. Después, en el menú de configuración del móvil, buscando el apartado “conexiones” y pinchando la opción “MirrorLink”. La pantalla aparecía en la pantalla táctil.
MirrorLink a pleno rendimiento
Una vez instalado el teléfono en el sistema multimedia del coche, podíamos navegar a través de aplicaciones compatibles usando los íconos en pantalla. Los sistemas de control por voz y los controles en el volante también funcionan con MirrorLink, pero el móvil no se puede utilizar para controlar las funciones mientras la interfaz de MirrorLink está habilitada, más o menos como ahora. En pocas palabras, podíamos utilizar múltiples de aplicaciones compatibles desde la pantalla del sistema de infoentretenimiento del coche, pero no desde el móvil si está conectado, evitando más distracciones.
Por cerrar el apartado y para nostalgia, el sistema MirrorLink funcionaba con una variedad de tecnologías existentes como las IP, los puertos USB, las conexiones Wi-Fi y Bluetooth , o RTP y VNC, además de integrar en sus entrañas varias señales del coche como el GPS, la ubicación o la propia velocidad del coche que hace que todo funcione a la perfección gracias a una codificación inteligente.
La caída de MirrorLink y la actualidad
En lugar de adoptar un estándar existente, Apple y Google optaron por forjar sus propios sistemas de conectividad para el coche, marcando así el rápido declive de MirrorLink. Al principio, las aplicaciones de terceros para Android Auto eran escasas, y Google tardó en abrir sus puertas, pero contaba con un bastión importante: Google Maps. Es sabido por todos que Google nunca mostró interés completo en desarrollar sus aplicaciones para hacerlas compatibles con MirrorLink. En cambio, en 2014, anunció algo más completo: Android Auto, su propio sistema para realizar funciones similares.
Mientras la adopción de Android Auto crecía, MirrorLink caía y las compañías que inicialmente lo respaldaron cambiaban de rumbo. Samsung abandonó MirrorLink en 2020 mientras que las míticas HTC y LG desaparecieron del paisaje móvil (por completo). La mayoría de los fabricantes que aún incluían MirrorLink en sus dispositivos dejaron de hacerlo en algún momento entre 2015 y 2016. En la actualidad, es posible que tu coche aún sea compatible con MirrorLink, es más, en alguna prueba trasteando hemos encontrado la opción, pero es improbable que tu iPhone 15 o las aplicaciones que tienes instaladas lo sean. MirrorLink aún respira, pero en cierto modo, ha sido abandonado desde la llegada de Android Auto y CarPlay.
Como los nuevos contendientes de la conectividad llegaron pisando muy fuerte con unos sistemas mucho más integrados, con un UX más logrado y unas funciones más sencillas, MirrorLink paso a un segundo plano, como cuando Rayo McQueen se retiró de las carreras, que sabíamos que estaba ahí, pero sin prestarle demasiada atención.
Por parte de la Casa de Cupertino, y para todos los fans de este sistema esperamos con atención lo que deparará a CarPlay en 2024. Parte de esta evolución que comentamos más arriba es como los sistemas actuales se ajustarán al entorno de nuestros coches, para que estén mucho más integrados y que no parezca que tenemos dos pantallas diferentes. En este sentido, Apple apuesta por colaborar directamente con Porsche y Aston Martin, en nueva versión que va más allá de ser simplemente una aplicación en el sistema de infoentretenimiento, superponiendo una interfaz de usuario integral en cada pantalla del automóvil.
Entre las novedades que esperamos ver en el futuro destacamos la necesidad de incluir una mayor funcionalidad adaptada a la conducción, con controles esenciales e instrumentales integrados con los comandos específicos de cada vehículo. Porsche y Aston Martin serán pioneros en la adopción de este sistema, adaptando la interfaz CarPlay de próxima generación a sus diseños distintivos. Veremos como los herederos mejoran el legado de MirrorLink, sin duda el culpable de que podamos ver Google Maps en nuestro coche.
Fuente: Collecting Cars,The Verge, Xataka, Car Connectivity Consortium, Nokia y diversos blogs especializados.