De unas semanas a esta parte han comenzado a bajar las temperaturas. Ya hemos hablado sobre cómo preparar tu coche para el invierno, y entre ellas señalábamos la importancia de controlar la presión de los neumáticos. Resulta clave tanto porque llevarla con una presión inadecuada puede hacer que el coche consuma más… y sea más inseguro, al haber menor contacto con el asfalto.
A pesar de ser de vital importancia, hasta la mitad de los españoles lleva los neumáticos con presión baja, según el informe de Michelin. Y ojo, que esas cifras se dieron en los controles que la marca de neumáticos realizó… el pasado verano. Y es que, como nos recuerdan desde Goodyear, cuando bajan las temperaturas hay que prestar más atención a la presión, ya que baja alrededor de 0,5 bar por cada variación de la temperatura de 10 grados.
Un neumático a baja presión se desgasta más por el borde exterior, genera un excesivo calentamiento en el interior y puede reducir la eficiencia de combustible al aumentar la resistencia a la rodadura, además de pérdidas de adherencia, sobre todo con el firme mojado. De este modo, los neumáticos, uno de los componentes del triángulo de seguridad, pierde toda su eficacia.
Es muy sencillo llevar los neumáticos con la presión correcta. Lo más recomendable es revisar la presión al menos una vez al mes, siempre en frío (después de que el neumático reposen dos horas, tras circular menos de cinco km a una velocidad máxima de 50 km/. Si no cuentas con un manómetro, es habitual encontrarlos en las gasolineras y, por supuesto, en los talleres. Podrás encontar la presión correcta de los neumáticos (
La presión correcta del neumático podrás verla en el manual del vehículo si bien también suelen ponerla en la tapa del depósito de combustible, en la guantera o en el marco de la puerta del conductor. En los vehóculos más nuevos, dentro del equipamiento obligatorio desde el 1 de noviembre de 2014 se incluye el sensor de presión de neumáticos (TPMS), en un intento de que la gente no necesite siquiera perder un par de minutos y vea de un vistazo qué neumático puede darle problemas. Así el coche se comportará siempre mejor, con unas ruedas en buen estado en contacto con la carretera.
Fuente: Continental