¿Qué mejor manera de unir nuestra afición y una festividad tan peculiar? Y si encima nos fuera posible viajar hasta el carnaval de Rio de Janeiro, con semejante atuendo, la celebración sería casi completa. ¿Os apetece el plan?. Bueno, no deja de ser una ocurrencia, que quizá algún día lleve a cabo. De momento tendrá que seguir esperando entre mi enorme lista de asuntos pendientes…
Esta peculiar (también podéis ponerle el apelativo de “descabellada”, o cualquier otro) idea se me ocurrió a mí solito el otro día ojeando el e-mail. Entre las muchas noticias e informaciones que recibo a diario, relacionadas con esta nuestra pasión, hubo una que me llamó poderosamente la atención, quizá porque se tratase de unos de mis mayores ídolos, desde hace muchos años, dentro de la competición automovilística: el idolatrado Ayrton Senna.
Para los más “jóvenes” del lugar cabe recordar que en la máxima expresión de la competición automovilística, la F-1, no todo son las luchas entre Alonso y Vettel, entre Red-Bull y Ferrari, entre Adrian Newey y Stefano Domenicali. Afortunadamente queda en nuestra memoria una época en la que todavía “los hombres” estaban por encima de “las máquinas”, en la que los campeonatos se ganaban (o se perdían) en la pista y en la que los duelos épicos entre Senna y Prost hacían saltar mucho más que chispas entre los carenados de sus monoplazas. Luchas que hacían parecer disputas “de patio de colegio” a las actuales confrontaciones.
Pues bien, en ese correo electrónico, enviado por Silverstone Auctions, entre toda la “Automobilia” (entiéndase este anglicismo por todo tipo de recuerdos, accesorios u objetos que la gente colecciona porque una vez pertenecieron a algún famoso, o porque están relacionados con el mundo del automóvil) que salía a subasta (amén de numerosos vehículos y motocicletas), se encontraban dos objetos que suponían una rara oportunidad y por los que los verdaderos fans del piloto brasileño estarían dispuestos a “perder” un ojo de la cara: un casco de la marca Shoei utilizado durante la temporada 1993 (la última que estuvo en el equipo McLaren) y autografiado por el triple campeón del mundo; y un mono ignífugo de la marca OMP, empleado durante ese año en la escudería patrocinada por una mundialmente conocida firma tabaquera, con todos los logotipos de los “partners” que colaboraban con el equipo de Woking en esa postrera edición del Campeonato del Mundo de F-1 . Ni que decir tiene que, ambos objetos, están acompañados del pertinente “certificado de autenticidad” emitido por el equipo McLaren.
El único inconveniente de ese “disfraz” tan original (nunca mejor dicho) es que no se puede conseguir en la tienda de los “chinos” de abajo o en el “todo a cien” que hay a la vuelta de la esquina, ni siquiera en un mercadillo. Según los expertos tasadores de la compañía que los saca a subasta el precio del casco puede estar entre 42.000 y 50.000 libras esterlinas (de 50.000 a 60.000 euros aproximadamente), mientras que el del mono ignífugo del astro brasileño se situaría entre 22.000 y 30.000 libras (de 26.000 a 36.000 euros). Aunque siempre puede haber alguna sorpresa de última hora, resulta un poco caro para acudir a la fiesta que enfrenta a “Don Carnal contra Doña Cuaresma”, ¿no?
En cualquier caso si aún seguís interesados en estos objetos de culto, podéis pujar por ellos en la subasta “Race Retro Classic Car” que tendrá lugar el próximo sábado 25 de Febrero de 2012 en el Stoneleigh Park Coventry, en el condado de Warwickshire (Inglaterra). Y si no os es posible, siempre podéis echar mano de vuestra imaginación para pasarlo bien en esta “semana loca”.
Para los más nostálgicos aquí podéis ver unos vídeos donde recordar al mito de São Paulo:
[youtube width=»640″ height=»480″]http://www.youtube.com/watch?v=d6u8kvWgQ4k
http://www.youtube.com/watch?v=ehISVy_lLcM
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