Ya hace un tiempo que ha pasado el Salón de Detroit, pero los rumores de que el Opel Karl tendrá una versión eléctrica han hecho que volvamos la vista un mes atrás para intentar descubrir cómo podría ser ese modelo. Todo apunta a que empleará muchos elementos del futuro Chevrolet Spark eléctrico y que será fabricado en Corea del Sur.
La experiencia de Opel con los eléctricos no ha sido por ahora muy exitosa. Ya no se vende el Opel Ampera (primo hermano del Chevrolet Volt que probamos) aunque la segunda generación del Volt podría volver a reflotar la apuesta. De todos modos, ese futurible Karl eléctrico no llegaría al mercado hasta 2018, por lo que hay tiempo para evolucionar. Y ojo, que si toma parte de las ideas del Chevrolet Bolt Concpet (sí, con B, no no hemos confundido), podría ser una apuesta acertada.
El Chevrolet Bolt tiene poco que ver con el eléctrico de autonomía extendida que se vendía hasta hace poco en nuestro país. Se trata en este caso de un eléctrico puro, con un diseño compacto y una carrocería a medio camino entre un monovolumen y un compacto «convencional». Nos ha recordado ligeramente al BMW i3 (ver prueba), con un diseño futurista en el que destaca su enorme superficie acristalada, unas imponentes llantas de aleación, los faros y los pilotos con tecnología LED o el portón trasero de cristal.
El Bolt presume de cinco puertas y cuenta en su interior con cuatro plazas individuales, tapizadas en cuero blanco, lo que aporta mucha luminosidad al habitáculo. El puesto de conducción es muy futurista, con la casi total ausencia de mandos, pues todo se controla por medio de su pantalla central táctil de 10 pulgadas. Apenas cuenta con unos botones, también táctiles, para el manejo de la climatización y otros junto al selector del cambio. Tras el volante hay otra pantalla TFT donde se visualizan todos los datos referentes a la velocidad, la autonomía…
Un detalle muy curioso es el mando central, desde el que podemos seleccionar varios modos de conducción. Desde él, su conductor puede hacer prevalecer la deportividad o la eficiencia, variando el tarado de las suspensiones, la climatización, el tacto del acelerador…
Chevrolet no ha comunicado datos sobre la potencia o las prestaciones que del Bolt, pero sí datos de su autonomía. Puede recorrer hasta 325 kilómetros con una sola carga (200 millas, el objetivo que perseguía Chevrolet desde hace años y que ahora está más cerca). Se trata de una cifra una cifra que ya permite recorridos interesantes sin que sufrir la ansiedad por quedarse sin carga. Además, sus baterías de ión litio pueden cargarse al 80% en apenas 45 minutos.
Pocos datos más ha ofrecido la marca de la pajarita. Eso sí, si las previsiones del fabricante se cumplen, podría dar mucho que hablar. Y es que Chevrolet espera poder comercializarlo en Estados Unidos con un precio inferior a los 30.000 dólares (25.500 euros al cambio), lo que lo haría muy competitivo si tenemos en cuenta su autonomía. ¿Disfrutará ya el futuro Karl eléctrico de una tecnología tan avanzada?
Fuentes: Chevrolet, Autonews
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