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Luis Ramos Penabad

Llamada de atención en China: el calor obliga a cerrar puntos de recarga

Las ventas de coches eléctricos en China van como nunca. Han superado las previsiones más optimistas y esperan cerrar el año con más de 6 millones de unidades. Sin embargo, los flamantes nuevos propietarios de coches eléctricos se han encontrado un enemigo: el calor. Son ya 70 días con cifras nunca antes alcanzadas, de hasta 45 grados, que han dejado el país seco… y sin energía eléctrica.

La falta de energía ha cerrado temporalmente los puestos de carga públicos, o con restricciones horarias. Muchos de los conductores de coches eléctricos no tienen puestos de carga privados y se han visto con dificultades para sus desplazamientos diarios.

Las restricciones de electridad no tienen que ver con los coches eléctricos, sino con los episodios de clima extremo que se viven cada vez más con el cambio climático. Y en un lugar como la provincia de Shian, en el suroeste del país, que obtiene el 81 % de su electrididad de la energía hidroeéctrica, es un problema que el caudal del río se haya reducido a la mitad. Además, el calor hace que aumenten las necesidades de refrigeración, y con ello el consumo.

No solamente los propietarios de vehículos eléctricos se han visto afectados, también la industria, ya que se prioriza el sumistro de las necesidades más importantes. Así, además de complicar el encontrar un punto de carga operativo (o con menor potencia de carga), los propietarios de vehículos eléctricos también son alentados u obligados a cargar solo durante las horas de menor actividad.

Esto ha llevado a que en las redes sociales chinas se compartan vídeos de largas colas de vehículos eléctricos esperando para cargar, incluso a horas intempesticas. Un taxista de Chengdu comentaba en una entrevista que había llegado a las 20:30 y empezó a cargar a las 5 de la mañana. Y es que las colas han sido kilométricas:

Lecciones que aprender

El éxito de los coches eléctricos en China es innegable. Hay una enorme variedad de oferta, en todos los rangos de precios, muy competitivos gracias a las ayudas públicas a la compra. Ya son 10 millones de vehículos en las carreteras y en 2021 se vendieron más coches eléctricos en China que en el resto del mundo junto.

Es complicado realizar una infraestructura de recarga a ese modo, pero el esfuerzo es titánico: se han instalado cerca de 963.000 puntos de carga, en lo que va de 2022, cuatro veces más que el año pasado. Y la mayoría públicos, ya que es complicado (y caro) tener una plaza de aparcamiento fija en la ciudad donde poder cargar un coche.

En un episodio como este, un mayor número de puntos de recarga privados habrían solucionado parte del problema, ya que se considera uso residencial, para el que ha habido menos restricciones. Tampoco hay apenas paneles solares en los tejados que puedan cargar baterías de respaldo que luego pasar a los coches. 

La lección que aprenderá China es que deben invertir en red eléctrica (con mejores envíos a larga distancia) y diversificar los puntos de recarga. El auge del coche eléctrico no parece que vaya a detenerse por un verano más caluroso y, de hecho, los coches tienen el potencial de almacenar energía y poder devolverla a la red si fuese necesario en momentos de crisis como esta, han de verse como aliados para resolver estos problemas puntuales más que como generadores del problema.

Vía: Forococheseléctricos, Jalopnik

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