Los motores diésel son uno de esos clásico ejemplo de buenas noticias y malas noticias. Buena noticia: los motores diésel son mucho más versátiles y más eficientes que los motores de gasolina. Mala noticia: proferirán algunas emisiones, como el óxido nítrico y dióxido de nitrógeno, que ensucian las ciudades y aumentan la mortalidad. Buena noticia: los convertidores catalíticos puede evitar gran parte de esas emisiones. Mala noticia: el platino y otros metales preciosos que se pueden utilizar como catalizador son carísimos. Buena noticia: un equipo Nanostellar en Redwood, California, ha desarrollado un catalizador que sería mucho más barato.
Empecemos por algún concepto básico para no perdernos. Un catalizador es una sustancia que acelera o retarda la velocidad de una reacción… y que no participa en ella, por lo que se puede recuperar íntegramente. El platino, junto con el oro y el paladio son metales que se pueden utilizar como excelentes catalizadores. Claro que hay problemas, como los violentos conflictos laborales en Sudáfrica que han disparado su precio. Además, desde que la Organización Mundial de la Salud clasificó los escapes del diésel como cancerígenos, la demanda de platino para convertidores catalíticos para millones de vehículos es muy superior a la oferta.
Ahora, el equipo Nanostellar, dirigido por el Dr. Kyeongjae «KJ» Cho, profesor de ciencias de los materialesde la Universidad de Dallas y co-fundador de Nanostellar, está desarrollando un catalizador mineral, una alternativa más barata. Cho ha escrito ya sobre sus hallazgos en la revista Science, en donde relata que modelos de computadora mostraron que la mullita era un sustituto rentable.
¿Y qué mineral es la mullita? Parece ser que es un mineral de la clase de los neosilicatos y toma su nombre del lugar donde fue descubierto en 1924, la isla escocesa de Mull. Tampoco nosotros conocíamos este mineral, ya que es muy raro de encontrar en la naturaleza. ¿Por qué entonces sería rentable? Porque hay una versión sintética, que se produce comercialmente para su uso en diversas porcelanas. Tiene un punto de fusión muy alto, de 1840 C (lo que lo convierte en un catalizador muy atractivo. Además, las pruebas de laboratorio indican que los convertidores que utilicen mullita tendrían las emisiones un 45% más bajos que los de platino.
«Nuestra meta es alejarnos de los metales preciosos y reemplazarlos con los óxidos que se pueden ver en el medio ambiente», dijo el doctor Cho. «Hemos descubierto nuevas posibilidades para crear tecnología renovable, con nuevos materiales funcionales sin estar limitados por el suministro de metales preciosos». Que sigan avanzando. El nuevo catalizador, llamado Noxicat, será desarrollado para su uso comercial y otros trabajos está previsto para determinar su utilización en pilas de combustible.
Fuente: University of Texas at Dallas
Vía: Phys.org
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