Parece que al presidente ruso Vladimir Putin no le gusta su coche. Cansado de ver a los altos funcionarios rusos moverse en Mercedes y BMW, Putin ordenó hace un tiempo que se diseñase una limusina rusa para reemplazarlos. Según os contamos hace unos años, a Putin no le importaría demasiado rescatar la limusina ZIL-41047, la vieja limusina soviética del fabricante ZIL, que podría tener una segunda vida y volver a la carretera después de dos décadas.
Pero caro, viendo la oportunidad de negocio, las compañía rusa Marussia Motors han entrado al juego de encontrar un coche para el presidente y se han asociado a CarDesign.ru asocian para crear un concurso de ideas.
Durante la Guerra Fría, los coches de lujo soviéticos no eran nada del otro mundo. Las limusinas de Brezhnev y Kosygin fueron creaciones gigantescas pero nada refinadas, con el radio de giro de un buque portacontenedores y motores enormes que, paradójicamente, apenas movían el coche. Por eso en este concurso de diseño se busca un modelo totalmente diferente.
Ahora acaban de darse a conocer las imágenes de los conceptos de los nuevos operadores, de las que incluímos algunas en este artículo. Si esperas prototipos espectaculares, que violen las leyes de la física, olvídalo. Casi todos son conservadores o muy conservadores y todos parecen modelos de Cadillac o Bentley modificados.
¿Acaso no tienen imaginación los rusos? Por supuesto que sí, pero es que las normas del concurso de diseño son bastante rígidas. Solamente pueden pertenecer a uno de estos tres segmentos (minivan, limusina o SUV), deben ser motor delantero, tracción trasera, encajar dentro de un conjunto específico de dimensiones y «estar a la altura de los Mercedes-Benz, Rolls-Royce, Bentley». Además, las reglas también recomiendan partir de alguno de los actuales modelos rusos…
Con todos estos condicionantes, y sabiendo que el público objetivo son los jefes de Estado que tienen sus oficinas en el Kremlin, es hasta milagroso que pudiese salir algo más que una caja cuadrada para moverse de reunión en reunión, pasando por el aeropuerto. Según CarDesign.ru, el concurso recibió 40 inscripciones de estudiantes y profesionales y más de 80 de aficionados (algunos extranjeros).
Los resultados se anunciarán el 1 de mayo… casualmente el día del trabajo, cuando la Plaza Roja asistía a aquellos desfiles. El ganador de «Un coche para el Presidente» recibirá un premio en efectivo, además de poder trabajar en el desarrollo del coches reales. Los conceptos están siendo revisados por un jurado de expertos de automóviles y motores de Marussia.
Fuentes: CarDesign.ru, Moscow Times
Vía: Carscoops
Galería de fotos de algunos de los diseños;: