En realidad la conexión del vehículo no es directa con el semáforo sino que entra en contacto con la red de información del control de tráfico de la ciudad. Para ello, utilizara una conexión LTE tirando de datos de red y GPS que le permite mostrar en la pequeña pantalla delante del volante, el tiempo de espera o de paso del que disponemos. Un pequeño paso de muchos que permitirán construir una infraestructura red en la que todos vehículos funcionen dentro de ella cual hormigas organizadas.
Audi lleva desde el año 2010 trabajando para mejorar la conectividad de los vehículos con su entorno. A día de hoy están más cerca de conseguir su propósito de construir una ciudad inteligente «increíblemente conectada». La novedad con la que nos hemos encontrado es el coche que «susurra a los semáforos» o al menos se comunica con ellos para saber en qué momento se van a poner en rojo e impedir el paso, o en verde dejando la vía libre.
Conociendo el tiempo en el que se pone en verde de nuevo y la velocidad del vehículo antes de llegar al semáforo, el sistema avisa al conductor de qué velocidad tomar para no tener que parar y así permitir una conducción más cómoda y eficiente. Una idea bastante mejor que aquel semáforo con radar que controlaba los movimientos de los coches para ponerse en ámbar.
De esta forma, según se puede oír en el vídeo promocional, se busca mejorar la experiencia del conductor evitando estrés innecesario, si llegas tarde, lo vas a hacer sabiendo que el semáforo dura 45 segundos en ponerse en verde de nuevo, muy reconfortante. Ironías a parte, el sistema permitirá en un futuro no muy lejano poder evitar las congestiones de tráfico mediante el reconocimiento del resto de vehículos y de vías alternativas donde hay más fluidez de tráfico.
Los primeros vehículos Audi que tendrán esta tecnología son el Audi Q7, Audi A4 y todos aquellos A4 Allroad fabricados después del 1 de junio de 2016. Los conductores al igual que las ciudades deberán estar suscritos al proyecto «Audi Connect Prime» que busca convertir las ciudades en verdaderos ordenadores vivientes y mejorar la conducción en las urbes. Por el momento, se espera que el sistema funcione en cinco o siete ciudades estadounidenses a finales de este año. Toca, por tanto, esperar hasta que la tecnología se difunda en Europa.
Vía: Engadget
Fuente: Audi