Las Flechas de Plata son un icono de la automoción y los deportes del motor, y poco más hace falta decir sobre un sobrenombre que se dio a una generación de coches irrepetible. Desde los años 30 hasta que comenzó la Segunda Guerra Mundial, los coches de Mercedes-Benz sentaron cátedra en el mundo de las carreras y todavía hoy son recordados como una época gloriosa para la automoción.
Este año se ha cumplido el 80 aniversario de las Flechas de Plata, y Mercedes-Benz ha querido celebrarlo de manera especial, como en su 75 aniversario. Esta vez ha sido rememorando 12 momentos míticos de la historia de las carreras de esa época, reproduciéndolos en una docena de fotografías generadas por ordenador, haciéndonos volver atrás en el tiempo de un modo espectacular. Son estos:
3 de junio de 1934: Nace la leyenda. Nürburgring, Alemania
Las Flechas de Plata nacen en este momento, horas antes del Gran Premio de Alemania. El límite de peso del coche para competir es de 750 kg y los Mercedes-Benz W25 lo superan por un kilo. El director del equipo, Alfred Neubauer, decide rascar la pintura blanca de los coches en el último momento para poder competir. De esta manera consiguieron rebajar el kilo que les sobraba para competir sin pintura y lucir el plateado por el que siempre serán recordados.
1 de julio de 1934: Derrotados pero no desesperados. Montlhéry, Francia.
Louis Chiron humilló a todos los grandes pilotos en el Gran Premio de Francia con un Alfa Romeo muy inferior al resto de coches. Fue un momento muy duro para las Flechas de Plata, a las que se uniría este gran piloto posteriormente.
12 de mayo de 1935: Victoria épica en un circuito épico. Mellaha, Libia.
Una de las carreras de coches más míticas que jamás haya tenido lugar, demostró que Mercedes-Benz y sus Flechas de Plata estaban un nivel por encima del resto, colocando dos pilotos entre los tres primeros. El piloto de la escudería alemana, Rudolf Caracciola, se hizo con la victoria.
22 de septiembre de 1935: Apedreados. Lasarte, España.
Luigi Fagioli en su Mercedes W25 consiguió adelantar a Bernd Rosemeyer mientras les llovían piedras en el Gran Premio de España. A pesar de todo, Mercedes-Benz dio un golpe sobre la mesa consiguiendo que los tres primeros clasificados fueran pilotos suyos.
13 de abril de 1936: El reinado del Maestro de la lluvia. Mónaco.
Día en el que la lluvia y una pérdida de aceite causaron el mayor accidente en la historia de las Flechas de Plata. A pesar de la lluvia torrencial que cayó ese día, las Flechas de Plata coparon el podio con Caracciola a la cabeza. Este último se ganó sobrenombre de «Maestro de la lluvia» al ser el primer clasificado en el Gran Premio del principado.
30 de mayo de 1937: Más pronunciado, fuerte y rápido. AVUS, Alemania.
En el mítico autódromo de Berlín, Bernd Rosemeyer en su Auto Union persiguió al Mercedes-Benz de Rudolf Caracciola. El tiempo de 4:11.2 segundos de Rosemeyer en esa vuelta a una velocidad media de 276,39 km/h, marcó un récord del mundo que se mantuvo imbatido durante 34 años.
26 de septiembre de 1937: La curva que hizo romper. Brno, Checoslovaquia.
Tazio Nuvolari, quien corría para Alfa Romeo, perdió un neumático en la quinta vuelta del Gran Premio de Masaryk. A pesar de ello y de tener un coche inferior al resto, consiguió acabar quinto en una actuación histórica. Al final de ese año se convertiría en uno de los principales rivales de Mercedes-Benz, fichando por Auto Union.
2 de octubre de 1937: El salto de Donington. Donington, Inglaterra.
El Mercedes W125 de Manfred von Brauchitsch salta de manera increíble al pasar por un reborde de la pista junto al Auto Union de Bernd Rosemeyer que le perseguía. La increíble potencia del W125 era la culpable de que el coche fuera capaz de elevarse tanto.
24 de julio de 1938: Quemado y accidentado. Nürburgring, Alemania.
El director de equipo Alfred Neubauer ayudó al piloto Manfred von Brauchitsch a salir de su Mercedes-Benz W154 que ardía en medio del pit lane. El piloto de Mercedes consiguió volver a entrar en la carrera pero se accidentó rápidamente, permitiendo que su compañero británico Richard Seaman ganara el Gran Premio de Alemania.
21 de agosto de 1938: Deja que llueva. Bremgarten, Suiza.
Histórico duelo en el que Rudolf Caracciola y Manfred von Brachitsch persiguen a su compañero de equipo, Richard Seaman. La lluvia torrencial que cayó fue casi tan histórica como el duelo entre pilotos, que lo ganó Caracciola al adelantar a Seaman en la vuelta once, y haciendo valer así su apodo de «Maestro de la Lluvia».
25 de junio de 1939: Una dura victoria. Spa, Bélgica.
Hermann Lang adelantó al coche en llamas de su compañero de equipo Richard Seaman, quien poco después moriría. De esta manera, Hermann Lang obtuvo una dura victoria en una carrera vestida de luto para las Flechas de Plata.
23 de julio de 1939: El patriótico final. Nürburgring, Alemania.
Rudolf Caracciola cruzó la línea de meta en primer lugar en el Gran Premio de Alemania frente a 250,000 personas. Las Flechas de Plata ganaban en casa, siendo el último Gran Premio antes de la Segunda Guerra Mundial y siendo también la última victoria que consiguió Caracciola.
Making off
Seguro que, como nosotros, te habrás preguntado cómo se han realizado estas fotografías. Por suerte, desde Mercedes-Benz han pensado en ello y han publicado este vídeo, para mostrar cómo se realizó todo. Solo después de un enorme trabajo de edición posterior se ha podido disfrutar del increíble resultado del que has podido disfrutar:
Fuente: Silver Arrows Project
Galería de fotos: