¿Alguna vez te has preguntado cómo se rueda una persecución? Obviamente no todos los actores de Hollywood son conductores profesionales y saben hacer trombos y derrapes espectaculares. Es por eso que se han inventado ciertos trucos para que estas persecuciones queden tan espectaculares en pantalla. Estos son algunos de ellos (no iban a desvelárnoslos todos, claro):
Efectos especiales al natural
Cuando comenzaron a rodarse las primeras películas, las persecuciones se hacían tal y como las vemos en pantalla. Es decir, los actores se montaban en el coche y ellos mismos realizaban los trombos o las acrobacias que el guión exigiera. Por supuesto, las medidas de seguridad con las que contaban eran mínimas y es por esto que muchos actores acababan heridos durante las grabaciones.
Lo que ahora llamamos «low cost»
Más adelante se empezaron a grabar estas escenas en un plató donde el actor simplemente movía el volante con una proyección del escenario que se quisiese conseguir detrás suyo. La sensación de movimiento del coche es gracias a que lo balanceaban delante de la cámara. Así lo hizo Gary Crant en Con la muerte en los talones.
La magia del cine gracias a los cromas verdes
Más adelante está técnica se mejoró gracias a las pantallas de croma. El croma es una pantalla con la que, después del rodaje, se añaden los efectos especiales necesarios
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=-QJO5e58E7k
Las avanzadas tecnologías de Fast and Furious
Otro gran avance que introdujo la productora de Fast and Furious fue el Mic Rig. El Mic Rig es una furgoneta en la que el coche va acoplado. Esta furgoneta puede alcanzar velocidades más altas que otros camiones que se utilizaban para la misma función, además de la posibilidad de hacer trombos y derrapes y dar más realismo a estas escenas.
Conducción remota
Aunque el Mic Rig se quedá bastante atrás en cuanto hablamos de técnicas de filmación de escenas coches si lo comparamos con el Go-Mobile. Alcanza los 220 km/h y tiene un sistema de conducción remota para que los especialistas puedan hacer las espectaculares maniobras mientras el actor se limita a girar un volante ficticio y pretender que conduce. Con este sistema se grabó, por ejemplo, a Matt Damon en el Mito de Bourne.
En Matrix Reloaded se utilizó la misma idea, solo que esta vez el especialista sí que iba dentro del coche, concretamente en la parte de atrás.
Estas escenas pierden un poco el «encanto» miradas desde este punto de vista aunque el resultado no dejará de sorprendernos nunca.
Foto principal: Roland Brunner