La actual generación del BMW Serie 3 es ya una de las mejores berlinas del mercado (elegido mejor coche lanzado en 2011 por los lectores de coches.com). Pues bien, dos años después de su lelgada al mercado, tenemos por fin las imágenes de su versión más deportiva, el BMW M3 2014 que, como sabrás, esta vez no contará con carrocería coupé (su denominación cambia a BMW M4).
Ya conocíamos muchos de los detalles técnicos del BMW M3, que la marca hizo públicos en el mes de octubre. Equipara un propulsor de 3.0 litros y 6 cilindros en línea que ofrece una potencia de 431 CV gracias a la doble sobrealimentación. El peso no superará en ningún caso los 1.500 kg, gracias a la dieta de adelgazamiento consistente, entre otros, en la utilización masiva de la fibra de carbonos en lugares como el vano motor o el techo. Pero faltaba por conocer la imagen de la nueva bestia de BMW… Y el resultado, ahora que contamos con las fotos oficiales, es realmente impecable
Si un Serie 3 ya tiene una línea deportiva muy marcada, el BMW M3 gana músculo hasta tal punto que se convierte en, posiblemente, la berlinas medias con líneas más dinámicas del mercado. Su diseño, claramente enfocado a la deportividad que se potencia con multitud de detalles a lo largo y ancho de la carrocería.
En el frontal estrena un paragolpes con grandes entradas de aire, necesarias para refrigerar correctamente todo el arsenal mecánico que BMW ha escondido bajo el capó. La parte trasera del M3, recuerda mucho a la del todopoderoso BMW M5, con cuatro salidas de escape medianamente centradas y coronadas por un difusor plenamente operativo.
En la vista lateral podemos observar que, respecto a la anterior generación, las aletas son más anchas para poder alojar las enormes llantas de 19 pulgadas y los ejes ensanchados. Además, una pequeña salida de aire (también con función aerodinámica) a la altura de la aleta delantera enfatiza aún más el carácter agresivo del M3. Además permitirán identificar a un M3 de un primer vistazo.
En el interior los detalles deportivos también son numerosos, empezando por los asientos envolventes tapizados en cuero, que contarán con regulación eléctrica y calefacción . El sapicadero también va forrado en cuero prácticamente en su totalidad, dando una sensación de calidad a la par que de deportividad. El emblema M aparece ya en los umbrales de las puertas nada más entrar. Y el volante, la palanca de cambios y la instrumentación son específicos, especialmente diseñados para añadir un toque extra más de picante a la experiencia.
Pero seguro que te interesará saber más datos del propulsor de seis cilindros de 431 CV de potencia «entregados de forma muy lineal para su naturaleza sobrealimentada», según aseguran en BMW. El par es impresionante, de 550 Nm entre 1.800 y 5.390 rpm y el corte sobre las 7.600 rpm. Hará de 0 a 100 km/h en 4,1 segundos, más rápido que un BMW M5 Sedán y alcanza 250 km/h de velocidad punta (280 km/h con Driver’s Package opcional).
Y estas espectaculares prestaciones se han logrado con un consumo que es un 25% menor que el anterior modelo: 8,3 litros/100 km y unas emisiones de CO2 de 194 g/km. Datos impresionantes, logrados con la función de parada y arranque automático Auto Start Stop, la recuperación de energía de frenado y la nueva dirección asistida electromecánica.
La potencia se transmite, como no podía ser de otra forma, a las ruedas traseras mediante un cambio manual de seis marchas con función punta-tacón o un cambio automático de doble embrague con asistente para quemar rueda de manera controlada y función de salida lanzada Launch Control. Cuenta además con suspensión adaptativa M que con tres programas (COMFORT, SPORT y SPORT+) que modifican la dureza para adaptarse a la conducción del día a día o una jornada de circuito. De serie utiliza frenos BMW M Compound perforados, opcionalmente se podrá escoger carbocerámicos.
Fuente: BMW
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