Aunque bien es sabido que la relación entre coche y bicicleta no es la mejor de las posibles, el tiempo nos ha demostrado que la justa combinación de ambas puede resultar muy eficaz.
Desafortunadamente, en la mayoría de las ciudades españolas circular en bicicleta es todavía hoy un deporte de alto riesgo, así que muchos optan por recurrir al «enemigo» de las cuatro ruedas en busca de lugares menos peligrosos.
El Real Automóvil Club de España (RACE) ha hecho público un estudio donde afirma que en los trayectos cortos la mayoría de los conductores optan por transportar la bicicleta en el interior del vehículo, sin las sujeciones adecuadas con el consiguiente riesgo para la seguridad que supondría en caso de accidente.
La marca alemana Opel, ha presentado estos días un nuevo soporte portabicicletas que promete corregir una de las grandes quejas de los usuarios: la poca funcionalidad de los ya existentes. El producto consiste en un sistema retráctil escondido detrás del parachoques trasero, que ha sido bautizado como FlexFix y que se introducirá en los nuevos modelos del Meriva, Astra, Corsa y Antara.
El sistema está diseñado para transportar dos bicicletas de hasta 20kg cada una y ruedas de entre 18 y 28 pulgadas, y se activa a través de una palanca situada en el maletero que desplaza el soporte hasta la parte trasera del vehículo, fijando la bicicleta a las ruedas y el manillar.
Entre los beneficios, Opel resalta un ahorro en combustible de hasta 2 litros a los 100 km, debido a que el rozamiento del aire es menor que en otros sistemas portabicicletas y además su funcionamiento ergonomico evita posibles problemas de espalda.
Sin embargo, el FlexFix no cuenta con ningún sistema de seguridad y su posición en la zona trasera elimina la rueda de repuesto que ha sido sustituida por un compresor y un líquido antipinchazos.
El sistema Flex Flix estará disponible con un precio que oscila entre los 460 euros del Corsa y los 665 euros del Antara.