Tras conocer los coches ganadores del Dakar en la década de 1980 hoy toca repasar la década de los noventa, Empezó la profesionalización y los franceses siguieron destacando como a final de las década anterior, primero con Peugeot y después con Citroën. Con la victoria de Kenjiro Shinozuka, en 1997, dio comienzo una época de dominio absoluto de Mitsubishi que se prolongó hasta 2007. En este periodo, solamente Jean Louis Schlesser pudo arrebatarle dos victorias con su buggy azul al fabricante japonés. Pero antes fueron estos coches ganadores del Dakar:
1990. Peugeot 405 T16 Gran Raid
Este Peugeot 405 estaba inspirado en el modelo de serie, aunque el Grand Raid era 25 centímetros más corto y solo tenía dos puertas (una idea que el preparador francés Heuliez ya había tenido con el 405 Coupe Concept). Arrasó en el Dakar y ningún otro coche fue capaz de hacerle sombra. El rally se lo llevó Ari Vatanen, con Bruno Berglund como copiloto, y ganaron nada menos que siete etapas.
El coche, con un chasis tubular, contaba con un motor 1.9 Turbo, tenía nada menos que 400 CV y consumía 40 litros a los 100 km. Pesaba apenas 1.320 kilos y al finalizar la carrera, uno de los responsables técnico sde la marca indicó que los pilotos solo habían aprovechado el 70% del potencial del vehículo.
1991. Citroën ZX Rally Raid
Tras la edición de 1990, Peugeot se retira del Dakar y traspasa tecnología y pilotos a la nueva estructura de Citroën. El nuevo coche mantiene el esquema de suspensiones del 405, aunque apuesta por un motor menos potente (y más fiable) e incorpora una caja de cambios de siete velocidades.
De nuevo fue Ari Vatanen quien se llevó la vistotria final, con Bruno Berglund como copiloto. El Citroën ZX, de 1.450 kg de peso, logró seis victorias de etapa aunque su motor 2.5 Turbo que rendía 300 CV no se mostró tan fiable como se prometía. Solamente dos de los cuatro vehículos inscritos llegaron a Dakar ya que los otros dos salieron ardiendo en carrera.
1992. Mitsubishi Pajero Proto
Este fue la primera edición del Dakar que no terminó en la capital de Senegal, sino en Ciudad del Cabo (Sudáfrica). También hubo una novedad muy importante para el desarrollo de la carrera ya que por primera vez se permitió el uso de sistemas GPS.
Después de siete años sin ganar, el fabricante nipón Mitsubishi copó los tres escalones del podio. La primera posición fue para Hubert Auriol, que se convirtió en el primer piloto en ganar el Dakar en la categoría de motos y coches y se ganó el apodo de «el Africano». Phillippe Monet fue su escudero en el Mitsubishi Pajerocon motor dos litros Turbo y 350 CV de potencia, que pesaba 1.460 kg
1993. Mitsubishi Pajero Proto
La carrera volvía a terminar en Dakar y Mitsusbishi repetía victoria con Bruno Saby al volante y Dominique Serie como copiloto. Eso sí, contaron con mucha mayor oposición por parte de Citroën, que ocupó la segunda y tercera posición en el podium con Pierre Lartigue y Hubert Auriol a los mandos de sendos ZX. El Pajero era prácticamente idéntico al de la edición anterior, con una mecánica de dos litros turbo y 350 CV de potencia.
1994. Citroën ZX Rally Raid
Con un llamativo color rojo que había inaugurado a mediados de 1992, la cuarta evolución del ZX presentaba un frontal más parecido al modelo de calle y unos pasos de rueda más ancho.Su domino fue abrumador desde el inicio de la prueba en París… al final que también fue en París. Pierre Lartigue, con Michel Perin como copiloto, arrasaron. El galo se adjudicó diez victorias de etapa (16 en total para el equipo) de un total de 20 especiales.
Este ZX al que nadie hacía sombra en tierras africanas pesaba 1.430 kg y tenía un motor 2.5 Turbo que rendía 330 CV de potencia.
1995. Citroën ZX Rally Raid
El Citroën ZX que tan buenos resultados había cosechado un año antes, volvió a la carga en tierras africanas con la misma mecánica, un motor 2.5 turbo de 330 CV que movía los 1.430 kg del coche. Apenas se ensancharon un poco más las vías respecto a la versión anterior y así, con Pierre Lartigue a los mandos y Michel Perin como copiloto, volvieron a ganar esta edición. Fue la primera vez que la carrera no salió de Francia. Fue Granada la ciudad que vió partir a los aventureros.
1996. Citroën ZX Rally Raid
El dominio del Citroën ZX de 330 CV continuaba siendo abrumador. Se trataba en esencia del mismo coche de los dos años anteriores y cuatro ZX estuvieron entre las cinco primeras posiciones. Ganó de nuevo Pierre Lartigue con su copiloto Michel Perin. Pero de las once victorias de etapa (de las 16 totales, solo una fue para Lartigue mientras que siete se las llevó Ari Vatanen. Es lo que tiene la regularidad.
1997. Mitsubishi Pajero Evo
Citroën se quedó fuera del Dakar cuando la organización decidió «cargarse» la categoría T3 (prototipos de fábrica). Con el rival más fuerte fuera de la parrilla de salida, Mitsubishi aprovechó para llevarse el gato al agua. La marca del diamante alineó tres Pajero Evo y un Pajero Sport, encuadrados en la categoría T2. A pesar de sus 1.760 kg de peso, el Pajero Evo motor V6 de 3.5 litros que rendía 260 CV, pilotado por Kenjiro Shinozuka y con Henri Magne copilotando, ganó la prueba. Muchos de sus rivales eran bastante más rápidos, pero este Pajero, una evolución del modelo de serie hizo de su mayor resistencia su mejor virtud.
1998. Mitsubishi Pajero Evo
Las victorias dan alas (y normalmente, más presupuesto para el año siguiente). Sus coches pasaron por encima de sus rivales y ganaron todas las especiales, salvo la última, en el Lago Rosa. El ganador fue el coche pilotado por Jean Pierre Fonteany y copilotado por Gilles Picard. llegó a existir una versión de producción del modelo, que mantuvo el motor V6 de 3.5 litros de cubicaje y 260 CV. Alcanzaba 180 km/h de velocidad máxima y sus depósitos tenían capacidad para 400 litros de combustible.
1999 Renault Mègane Schlesser
La primacía de Mitsubishi tuvo un invitado sorpresa en medio de su reinado. Después de varias participaciones con buggies diseñados y construidos por él mismo, el francés Jean Louis Schleser consiguió la victoria con un vehículo de dos ruedas motrices y con mecánica Renault. Su copiloto era Phillippe Monet y el español José María Serviá, por primera vez, formaba equipo junto al galo en el Dakar. Este curioso Mègane montaba un motor V6 de 3.5 litros que rendía 260 CV. Alcanzaba altas velocidades gracias a que solamente pesaba 1.220 kilogramos.
Continuará…