Si por algo es conocido el Suzuki Vitara es por ser un todoterreno con más de tres décadas de historia a lo largo de cuatro generaciones. Sin embargo, hay que reconocer que en mercado quedan muy pocos de esos 4×4 auténticos de antaño y que la mayoría se han refinado con el paso del tiempo. Tras haber probado el último Vitara en formato híbrido vamos a intentar comprobar si ha sido su caso o si mantiene su esencia inalterada. Ya teníamos la referencia del Jimny, que es precisamente de los que no ha cambiado nada.
El Suzuki Vitara, técnicamente, es un SUV pequeño. Con el cambio de la segunda a la tercera generación ya hubo bastante adaptación y se pudo ver el refinamiento. El actual lo cierto es que ha dejado de ser un todoterreno puro, es más un crossover con ciertas aptitudes fuera del asfalto. El motivo es principalmente la pérdida de cotas, pues sus ángulos no son demasiado favorables para la conducción off-road y su distancia libre al suelo es de 175 mm. En todo caso, es mucho mejor que la media.
Hay que reconocer que quedan pocos SUV pequeños que ofrezcan la opción a tracción total. El Vitara es uno de ellos, gracias al sistema AllGrip Select, que ha demostrado ser eficaz en cualquier tipo de situación. Incluso entre sus modos de conducción tiene uno, el Lock, para bloquear esa tracción total y poder salir de situaciones embarazosas. Como decíamos, no tiene reductora ni es un vehículo con un claro enfoque todoterreno, pero es de los mejores en ese aspecto entre sus rivales y en la actualidad.
A ello hay que sumarle que sea un coche que tiene la etiqueta ECO gracias a la electrificación en dos niveles. Disponible con un sistema microhíbrido o con uno Full Hybrid, el Suzuki Vitara destaca por ese y otros motivos. Lo que más nos gustó de él fue el completo equipamiento que traía de serie y los bajos consumos obtenidos. Tiene que mejorar ciertas cosas como la tecnología algo obsoleta y su maletero pequeño comparado con los de la competencia. Pero queda claro que es un modelo que ha sabido adaptarse y mantener su filosofía a partes iguales.
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