El nuevo Honda Jazz quiere reafirmar su posicionamiento en el segmento B de los monovolúmenes utilitarios, manteniendo las cualidades de flexibilidad, sentido práctico y fiabilidad, la economía, las emisiones y la comodidad de conducción, reafirmándose como una alternativa para futuros clientes, tras la experiencia de las más de 500.000 unidades vendidas desde 2009. Apunta a rivales directos como el Kia Venga o el Citroën C3 Picasso.
El exterior de nuevo Jazz recibe algunos cambios, que aunque son ligeros, consiguen rejuvenecerlo bastante. Estos cambios afectan principalmente a los faros (con un toque rojo en las versiones convencionales), los paragolpes y la parrilla central.
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Los focos principales han sido rediseñados, al igual que la boca de aire, más estrecha pero también más elevada, y nuevos acoples para los faros antiniebla. La firma nipona asegura que los cambios realizados en los paragolpes cumplen una función aerodinámica, ayudando a que el flujo de aire que transcurre por el Jazz provoque menos turbulencias en la parte trasera del vehículo. Hay cuatro colores más para pintar el Jazz a gusto del cliente: azul Azure, metal pulido, titanio Urban y bronce Ionized.
En cuanto al interior, se han realizado ciertas modificaciones, pequeñas, que hacen que tenga un mejor aspecto, y en algunos casos, resulte más funcional (por ejemplo, se ha cambiado el mando del aire acondicionado para que sea de lectura más fácil). El esquema básico de todo el salpicadero es el mismo, pero los materiales empleados son ahora más oscuros, y parecen de mejor calidad.
Destaca más por la calidad del ajuste que por la calidad de los materiales. Sirva de ejemplo el sonido que hacen las puertas al cerrarse, propio de un coche de un precio superior, o la solidez al tacto de las palancas ancladas en la columna de la dirección. Aparte de esto, hay pequeños cromados que, siendo discretos, consiguen que parezca que el habitáculo está más elaborado.
No es menos cierto que hay algunos otros materiales de tacto duro en zonas menos visibles del habitáculo, pero acordes con un coche del rango de precio del que estamos hablando. Un «pero»: algunos de los botones son algo imprecisos al tacto y parece que hay que hacer un recorrido constante para que «obedezcan».
El puesto de conducción es satisfactorio. La posición de conducción es algo elevada, y es fácil encontrar una postura en la que nos encontremos cómodos. Todo queda a mano, y el volante (de buen un tacto bastante agradable), es fácil de manejar.
Los asientos resultan amplios, y no brillan por su capacidad para recoger el cuerpo, pero son suficientes para un vehículo de estas características. Sin embargo, esto se mejora gracias al sistema Honda Magic Seats, con el que podremos configurar la posición de todos los asientos para obtener una mayor capacidad de carga, o para introducir objetos que, por sus dimensiones, en principio no podríamos transportar.
Tiene cuatro formas de acomodo: modo normal o Regular Mode, Tall Mode, Upper/lower Mode y Long Mode. Podemos obtener una capacidad de carga de 399 litros en las versiones de gasolina, ampliables hasta los 1.320 litros (teniendo además un fondo completamente plano). Además, algunas configuraciones nos permitirán llevar objetos muy largos (hasta superar los 2 metros), o altos (hasta 1,28 metros disponibles entre el suelo y el techo).
Honda Jazz 2011. Motores
La opción más básica es el 1.2 gasolina de 90 CV y con un par motor máximo de 114 Nm, disponible a 4.900 revoluciones por minuto. Acoplado a una transmisión manual de 5 velocidades, alcanza una velocidad de 177 km/h y acelera, de cero a 100 km/h, en 12,5 segundos, con un consumo medio de 5,3 litros cada 100 kilómetros y con unas emisiones de CO2 de 123 gramos por kilómetro.
La segunda opción es de 1.4 litros con 100 CV de potencia máxima a 6.000 vueltas y con un par motor máximo de 127 Nm, disponible a 4.800 rpm . Este propulsor puede estar asociado a un cambio manual de 5 marchas, con la que llega a los 182 km/h y tiene un consumo medio de 5,5 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 126 gr/km.
El bastidor de la nueva gama del Jazz se ha visto mejorado, especialmente en sus suspensiones, con modificaciones que ahora ofrecen un mayor y mejor confort dinámico, a la vez que facilita e incrementa la seguridad en su conducción. También, se ha trabajado sobre la dirección asistida eléctrica, para de esta manera ofrecer una trazada más precisa y exacta en carretera y más cómoda en las maniobras urbanas.
Honda Jazz 2011. Equipamientos
Puede elegirse en cuatro niveles de acabado, bastante completos incluso desde el básico S. Por encima se sitúan los Trend, Comfort y Elegance.
Fuente: Honda
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