Opel Corsa y Opel Agila están de enhorabuena. En poco tiempo podrán contar con la función de arranque y parada (Start&Stop). Por lo que detendrán el coche durante las paradas en ciudad con la clara consecuencia de recortar décimas en el consumo medio de sus trayectos.
En un principio se ofrecerán para modelos concretos. En el caso del Corsa, se brindará en el 1.3 CDTi de 75CV mientras que para el Agila, será en el 1.2 gasolina de 86CV. En el primer caso debería ahorrar alrededor de un 7% de consumo, con lo que dejaría a la marca en 4l/100km con una reducción del CO2 hasta los 105 gr/km. Frente al modelo Agila en el que el consumo se recorta un 2.5 % hasta los 5 l/100 km de media y con una emisión de CO2 sobre 116 gr/km. Datos realmente interesantes para evitar el pago del Impuesto de Matriculación.
Dicho sistema viene con un pack: ecoFlex Technology. Éste incluye una batería con un aumento en la capacidad, para llevar a cabo el mayor número de encendidos necesarios y una nueva gestión para la electricidad de la batería. Por el contrario, en el Corsa, el mismo paquete lleva una bomba de agua adicional. En ambos modelos encontramos un botón desde el cual desactivar la función de arranque y parada, a la vez que una modificación del climatizador que ayuda a establecer su funcionamiento aún cuando el motor esté parado.
Estas novedades no llegarán a los modelos sin un sobrecoste para nuestros bolsillos. En el modelo Corsa la instalación del paquete costará 350 euros, mientras que en el Agila sólo 300.
Si te ronda por la cabeza la posibilidad de rentabilidad o no con este significativo aumento del gasto, podemos asegurarte que si circulas, habitualmente, por ciudad el número de kilómetros para compensar la inversión se reduce. Pero si realizas una conducción mixta entre ciudad y carretera, teniendo en cuenta la vida media de un automóvil, compensa con creces. Así que no te lo pienses dos veces.
Para terminar debemos destacar que, a corto plazo, Opel incorporará esta misma función al Astra 1.3 CDTi.
Vía | Diariomotor