Presentado en sociedad hace un par de años, durante la celebración del Salón del Automóvil de París 2010, el Mitsubishi i-MiEVes un vehículo de propulsión eléctrica que ha colmado las espectativas comerciales de la firma japonesa. Su irrupción en el mercado supuso el primer paso al frente en el objetivo global de Mitsubishi, que quiere que en 2020, el 20% de su producción total sea de vehículos eléctricos.
Con una autonomía de 160 kilómetros, ligeramente superior a los de su gama, el i-MiEV, que además ha probado su seguridad, tiene un precio que varía entre los 33.000 euros y los 35.000 euros, dependiendo de los extras. De sobra es conocido que el precio es uno de los grandes inconvenientes para la expansión del vehículo eléctrico en nuestro país. A pesar de que son cada vez más los particulares que, basados en su propia experiencia, garantiza la rentabilidad del automóvil, parece que los españoles somos reacios al cambio.
Si usted, que me lee, es uno de esos que se está pensado el salto a la tecnología del futuro, seguro que le interesará saber la iniciativa de Mitsubishi para rentabilizar aún más la electricidad del i-MiEV. Bautizada como MiEV Power Box, la última apuesta de la automotriz japonesa, es un alimentador de electricidad capaz de almacenar y utilizar para otros menesteres, la energía almacenada en el vehículo eléctrico.
Tiene una capacidad de suministro de 1500 watios de corriente alterna durante aproximadamente seis horas, si el vehículo está totalmente cargado, lo que viene a ser el consumo medio de una familia de Japón (suponemos que no será muy diferente al de las familias europeas). Mitsubishi tiene previsto iniciar la comercialización de la MiEV Power Box a partir del próximo 27 de abril, por un precio que por el momento no ha trascendido.
Vía: Actualidad Motor