Primero fue en el Maserati Ghibli, y ahora llega también el diésel al Maserati Quattroporte. El constructor italiano lo había anunciado en septiembre el año pasado, durante el Salón de Frankfurt 2013 y ahora llega a España.
Se trata del mismo propulsor que monta el Maserati Ghibli diésel, un turbodiésel V6 de 2.987 cc, producido por VM Motori y desarrollado por Paolo Martinelli, exjefe de motores de la Scuderia Ferrari Formula 1. Va acoplado a una caja de cambios automática de convertidor hidráulico de par de ocho velocidades. Esta mecánica desarrolla 275 CV de potencia y ofrece un par máximo de 600 Nm, con lo que el Quattroporte cubre los 0 a 100 km/h en 6,4 segundos y alcanza los 250 km/h. El consumo homologado es de 6,2 litros/100 km.
Esta nueva mecánica diésel se une a las dos motorizaciones de gasolina Twin Turbo, el V8 de 3,8 litros y 530 CV que monta el Quattroporte GTS y el V6 de 3.0 litros y 410 CV que equipan el Quattroporte S y el S Q4.
El Maserati Quattroporte diésel está disponible a partir de 107.060 euros. Es la versión más barata de la gama, si bien el precio se nos antoja un poco alto para una potencia que nos resulta escasa… para un Maserati. Y más uno tan grande. Porque recordemos que la sexta generación de esta gran berlina italiana (ver historia del Maserati Quattroporte) mide 5,26 m de largo y pesa 1.960 kg. Rivaliza con coches como el Audi A6, el BMW Serie 5 o el Mercedes Clase E, pero es mayor que ellos… y más deportivo. SIn embargo, el motor de gasóleo es clave. La mayoría de la ventas en segmentos D, E, y F premium en Europa es diésel, de ahí que convenga tener en tu gama una de estas mecánicas… o se lleva la venta la competencia.
Para quienes tengamos dudas del sonido de un motor diésel en un Maserati, la firma italiana ha incorporado el sistema Maserati Active Sound, que reproducie, gracias a dos actuadores acústicos que van al lado de los tubo de escape, los sonidos más distintivos de los propulsores de gasolina en función del tipo de conducción que se realice.
Esta nueva berlina diésel deberái disparar aún más las ventas de la marca, que en 2013 vendió nada menos que 15.400 unidades en todo el mundo, un incremento del 148% respecto a los años anteriores. El responsable de este crecimiento fue el Maserati Quattroporte. Su renovación convenció… y triunfó, hasta el punto que vendieron 7.800 unidades.
El objetivo de la marca es alcanzar 60.000 ventas anuales en 2015. Para ello cuenta con dos armas, el Maserati Ghibli, lanzado en noviembre de 2013 y que en apenas dos meses vendió 2.900 unidades, debería ayudar a duplicar ventas en este mismo ejercicio. El siguiente empujón debería ser el Maserati Levante, un SUV de lujo que seguro encajará muy bien en sus dos mercados principales, Estados Unidos y China.
Fuente: Maserati
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