Aunque prácticamente todos los que nos hemos sacado el carné de conducir –o en proceso de hacerlo– hemos odiado el momento del examen, ciertamente es imperante aprobarlo para ser capaces de conducir legalmente un coche. Y no solo conviene por el tema de que puedes ir a la cárcel si practicas dicha actividad sin tener el carné. Pasar unas pruebas de aptitud también son imprescindibles para conocer los fundamentos de la circulación y la máquina que uno lleva entre manos.
El examen teórico, de hecho, es el que nos pone en conocimiento del Reglamento General de Circulación, como bien pueden ser las señales de tráfico que abundan en nuestras carreteras y el significado de cada una de ellas, o cómo hay que conducir ante situaciones de baja adherencia (lluvia, barro, nieve y hielo). Normalmente, esta suele ser la prueba más sencillita para la mayoría de los aspirantes. Sin embargo, una vez superada, llega la que también da más miedo, la práctica. Aquí es donde hay que aplicar los conocimientos adquiridos en el estudio de la teoría.
Pero no adelantemos acontecimientos. Para muchos, el examen teórico también ha llegado a resultar un auténtico suplicio. Y son otros tantos los que se sienten tontos por tener que repetir la prueba en más de una ocasión. Pero no hay que menospreciarse, porque siempre hay alguien que lo habrá intentado más veces. Una prueba que refleja ese espíritu de persistencia nos llega desde Reino Unido. La Driving and Vehicle Standards Agency (DVSA) ha publicado algunos datos sobre los intentos de aprobar el examen de conducir en el país de una sola persona.
Este estudio sacado de la maga a modo de curiosidad por una solicitud de Select Car Leasing, ha destacado el récord de intentos para sacarse el examen teórico, que es para un hombre británico de 42 años de identidad no revelada que requirió un total de 158 tentativas para, finalmente, hacerlo bien y recibir su ansiado aprobado. Esta prueba teórica en Reino Unido no es más difícil que la española, pues consiste en 50 preguntas, de las que se pueden fallar un máximo de cinco, y el tiempo disponible para superar dicha prueba es de una hora, más que suficiente.
El aspirante en cuestión tuvo que desembolsar 3.634 libras (4.085 euros, aprox.) solo en el pago de las tasas del examen. Pero bueno, mirando en perspectiva, al menos pudo ver un retorno por esta cantidad de dinero al obtener la licencia, que no es algo que otros puedan decir. Porque de los siguientes aspirantes en el podio de los intentos en el examen teórico hay una mujer –de 34 años– y otro hombre –de 32 años–, con 117 y 94 presentaciones respectivamente. El momento dramático es que la consagrada a la plata jamás consiguió el carné de conducir.
Mark Tongue, jefe de Select Car Leasing, dice que donde unos ven el fracaso, muchos podrían encontrar la historia motivadora que podría inspirarlos a seguir adelante. Nuevamente, es una cuestión de perspectiva. “Es cierto lo que dicen: si al principio no tienes éxito vuelve a intentarlo. Pasar el examen de conducir puede ser uno de los desafíos más difíciles de la vida, y algunos de nosotros pueden llevarnos muchos más intentos que otros”, destaca. Pero ya sea que falles la prueba una vez o 157 veces, no hay vergüenza en levantarse y volver a intentarlo”.
Fuente: Ladbible