La apuesta del Grupo Volkswagen por el GNC es firme y sigue avanzando sus sistemas de propulsión movidos por este tipo de combustible alternativo. Ya vimos como en SEAT se renovaban tanto el León TGI como el Arona TGI y ahora vemos como las novedades saltan a otra marca. Los Volkswagen Polo TGI y Golf TGI montan el tercer tanque de GNC, lo que consigue mejorar su autonomía, y también se adapta a mecánicas más recientes.
Si empezamos por el utilitario, el Volkswagen Polo TGI, monta el motor de tres cilindros y 1.0 litros que desarrolla 90 CV de potencia. Se basa en el popular 1.0 TSI, con la diferencia de que puede circular con GNC. Si antes contaba con dos depósitos para este combustible, ahora se le ha instalado un tercero que tiene 16,5 litros de capacidad. Si sumamos los otros dos se obtiene un total de 91,5 litros (13,8 kg de GNC), gracias a los que tiene una autonomía de 368 kilómetros según ciclo WLTP (60 más que antes).
En el caso del Volkswagen Golf TGI, el motor utilizado como base es el 1.5 TSI EVO, el último cuatro cilindros de la marca. Este bloque de gasolina se adapta al combustible y logra una potencia de 130 CV. Se sigue la misma fórmula de un tercer tanque de GNC de 23 litros de capacidad, lo que logra sumar un total de 115 litros o 17,3 kg del combustible alternativo. Gracias a ello la autonomía de GNC aumenta hasta los 422 kilómetros (80 kilómetros más).
Este tipo de vehículos destacan por su eficiencia y ahorro. En el caso del Golf TGI se cifra su consumo en 3,5-3,6 kg/100km, mientras que las emisiones de CO2 son de 98–95 g/km. Aunque solo estamos hablando del consumos de GNC, estos modelos también equipan un depósito degasolina para completar su funcionamiento. Aunque en esta última generación se plantea más como una medida en caso de aprieto, pues su tamaño se ha reducido para dar cabida a ese tercer tanque.
Fuente: Volkswagen