Las recientes elecciones en Estados Unidos podrían cambiar el paradigma del motor a corto plazo. Donald Trump ya ha asumido la presidencia del país y eso es sinónimo de que mantenga su guerra comercial contra china, aumentando los impuestos a sus productos. Sin embargo, también se están barajando los aranceles a los coches europeos, algo que pondría en jaque a algunos fabricantes que tienen buenos niveles ventas allí. Tanto es así, que algunos de ellos se están empezando a plantear la producción a nivel local.
Porsche y Audi estudian producir en Estados Unidos para poder saltarse esos temidos aranceles. Otras marcas como BMW o Mercedes ya lo hacen y no deberían afectarles tanto las medidas políticas. Sin embargo, toda la producción de Porsche proviene de Europa y al entrar al mercado americano se incrementaría su precio un 10 %. En el caso de Audi, lo más cerca que produce en es México y esos coches estarían gravados un 25 %. Es viable que este movimiento suceda a través de la fábrica de Volkswagen en Chattanooga (Tennessee).
Actualmente, en la planta americana de Volkswagen se producen modelos como el Atlas o el ID.4, cuyas ventas cayeron el año pasado. Estaría la opción de que les hicieran hueco para producir allí, pero también se baraja la planta de Carolina del Sur que actualmente está en construcción. Allí se establecerá el nuevo Scout, hecho en exclusiva para el mercado estadonidense. La cosa es que Audi podría hacer un derivado de este modelo, mientras que Porsche también se plantea hacer un SUV de representación por encima del Cayenne y usando la plataforma SSP. Todavía es pronto para asegurar, ya que estos modelos no llegarían hasta 2027/2028.
En todo caso, estas marcas de lujo de Grupo Volkswagen tienen que mover ficha en Estados Unidos. Porsche aumentó ligeramente sus números allí, pero Audi cayó un 14 % y vende menos de la mitad de lo que consigue BMW. Los aranceles ponen en peligro su negocio allí y les podrían causar pérdidas millonarias. También preocupa a la matriz, pues Grupo Volkswagen podría ver cómo se reduce un 15 % su beneficio operativo debido simplemente al arancel del 25 % a los productos procedentes de Sudamérica. Allí hacen modelos tan importantes como el Tiguan o el Jetta (ambos en México).
Fuente: Handelsblatt