Ya llevamos tiempo hablando de la llegada de los vehículos chinos a Europa. En los últimos años ha ido creciendo la oferta y su percepción va mejorando por cuestiones como su calidad o su desempeño en materia de seguridad. Por lo tanto, no es de extrañar que se haya alcanzado un récord en las exportaciones de coches chinos durante el último mes. Es fruto de esa creciente demanda que viene del continente europeo y nos queda claro que es una tendencia que no ha hecho más que empezar.
Durante el pasado mes de noviembre, las exportaciones de vehículos eléctricos de China alcanzaron un valor de 3.200 millones de dólares. Eso supone un incremento del 165 % respecto al año anterior y también se posiciona como el mes con la mayor cifra en el histórico. Este récord mensual se ha visto favorecido por algunos países europeos como Bélgica e Inglaterra, que fueron los mayores importadores al acumular casi el 70 % del total. Aunque los eléctricos son los principales protagonistas actualmente, el valor total de las exportaciones chinas llegó hasta los 6.000 millones de dólares.
Otro factor diferencial que está aupando las exportaciones chinas es que los grandes fabricantes europeos hayan aumentado su presencia allí. Actualmente conglomerados como Volkswagen Group o BMW Group están produciendo coches en China a través de joint ventures debido a la capacidad limitada que se están encontrando en sus instalaciones europeas por la crisis de semiconductores. Parece que cada vez va a haber un mayor volumen de producción en este país y muchos de esos vehículos se sumarán a la lista de exportaciones.
Y luego también están los propios fabricantes chinos. Algunos nativos como SAIC Motors (propietario de MG, entre otros) están aumentando sus ventas en Europa de forma considerable. Siguiendo con el ejemplo de MG, la firma ha aumentado mucho su red de distribución en los diferentes europeos para ver cómo crecen sus ventas. También en noviembre se dieron situaciones como que Tesla exportó 37.000 vehículos desde la planta china de Shanghái. Es una cifra notable para un año marcado por los confinamientos, pues en marzo fueron apenas 60 unidades y en abril ninguna.