Hacía tiempo que no oíamos hablar de la marca holandesa Spyker. Tras presentar el B6 Venator Spyder Concept pasó por innumerables problemas financieros. De tal magnitud que muchos la daban casi por desaparecida… pero en el Salón de Ginebra han querido demostrar que aún les quedan alientos para fabricar esos deportivos de aire retro que tanto nos gustan. Y qué mejor forma de demostrar el movimiento que mostrando la última de sus creaciones, el Spyker C8 Preliator.
El C8 Preliator mantiene las líneas del prototipo B6 Venator. Será un vehículo muy exclusivo, pues se fabricarán solamente 50 unidades, por un precio de 324.900 euros para la versión con cambio manual y de 330.990 para la que instala el cambio automático.
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El sucesor del Spyker Aileron, cuyas últimas cinco unidades se están fabricando aún en las nuevas instalaciones en Coventry, Reino Unido, tiene un nombre que significa «luchador o guerrero». Como es habitual en los productos de la compañía, se inspira en el mundo de la aviación, más aún desde su asociación con el fabricante de aviones Volta Voltar.
Incorpora un motor 4.2 litros V8 de origen Audi (el que montaba, por ejemplo, el R8). Con la magia que aporta el compresor volumétrico, rinde 532 CV de potencia. Podrá ir acoplado a una caja de cambios manual Getrag de seis marchas, pero opcionalmente puede equipar una automática ZF de seis relaciones. Así, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 322 km/h, gracias sobvre todo a las mejoras aerodinámicas, que incluyen un difusor trasero y pequeños aletines en splitter y taloneras.
El nuevo deportivo equipa llantas de aleación de 19 pulgadas en un nuevo diseño Turbofan, inspirado en los álabes de una turbina de aviación, con neumáticos Michelin en dimensiones 235/35 y 295/30. Las llantas esconden un poderoso sistema de frenos de AP Racing, con pinzas de color negro (opcionales en otros tonos) si bien podrá equipar frenos carbocerámicos.
Con un chasis y carrocería fabricados en aluminio, el Spyker C8 Preliator gana un 10% de rigidez torsional a pesar de ser algo más largo que el Alieron. Cuenta con un sistema de suspensión de doble triángulo que llega desde Lotus, con amortiguadores ajustables y barras estabilizadoras en ambos ejes. Según cuenta el fabricante, este superdeportivo holandés también mejora notablemente los niveles de ruido y vibraciones del habitáculo.
Como no podía ser de otro modo, se ha dejado a la vista el mecanisco del cambio, una de las señas de identidad del habitáculo. El fabricante asegura que se mejora la ergonocmía y comodidad de sus asientos, que pueden ir tapizados en 14 colores distintos, el que mejor combine con los 16 ofertados para la carrocería.
Hay también guiños al mundo de la aeronátiutica como los difusores de aire en forma de turbina y el sinfín de mandos y luces de la consola central sobre un fondo de aluminio. La tecnología queda reducida a un Head-Up Display en la parte superior del salpicadero, navegador GPS y un sistema de sonido con radio digital, conectividad Bluetooth y compatible con iPhone.
Fuente: Spyker
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