Si hay un compacto deportivo que tenga un halo de esplendor a su alrededor, ese es el Volkswagen Golf R 2024. Han pasado más de dos décadas desde el primer R, que se postulaba como un hermano mayor para el Golf GTI. El rendimiento ocupaba un nuevo lugar debido a la tracción total y a mecánicas de mayor potencia. Aunque no se han vuelto a recuperar los seis cilindros, las últimas actualizaciones han sorprendido por prestaciones. Y ahora tenemos un ejemplar que podría ser el último R puro sin electrificar.
La historia del Golf R es bastante dilatada, pero sus evoluciones siempre han sido comedidas. Este nuevo ejemplar lo cierto es que va en la línea con el último lavado de cara del Volkswagen Golf, con los habituales añadidos para lucir más deportivo. Eso se traduce en un mayor protagonismo de la iluminación gracias a los faros LED Plus con el logotipo de la marca iluminado y también con los pilotos traseros LED. En este ejemplar aparecen unas cortinas de aire en el paragolpes y llantas forjadas de 19 pulgadas Warmenau con un peso de apenas 8 kg cada una.
Una novedad también que afecta a su estética es el lanzamiento de una edición especial. Se trata del Volkswagen Golf R Black Edition, un modelo en el que, como su nombre indica, se prioriza el color negro. De ese tono se tiñe su carrocería, los logotipos, las pinzas de freno, las llantas específicas o los embellecedores del sistema de escape con salida cuádruple. Además, de serie monta el paquete R-Performance, que es opcional para el resto.
Dicho paquete sirve para mejorar su rendimiento, pues desbloquea la velocidad máxima del modelo y también le aporta un par de aspectos clave. Introduce los modos Drift y Special, siendo el primero para poder dar rienda suelta al eje trasero y el segundo para una puesta a punto inspirada en las condiciones de condiciones del Nürburgring Nordschleife. También se incluyen en este paquete un alerón de techo más grande, un cronómetro de vueltas GPS y medidor de fuerzas G.
Lo que quedaba claro es que el Volkswagen Golf R mantendría el motor 2.0 TSI de cuatro cilindros que ya había montado anteriormente. En la última edición especial llegaba a un nivel de potencia superior y, precisamente ese punto, es el que se toma de partida ahora. Son 333 CV y 420 Nm de par, siempre ligado a la transmisión automática DSG de siete velocidades y a la tracción total 4MOTION con R-Performance Torque Vectoring. Eso le permite mantener la aceleración de 0 a 100 km/h en 4,6 segundos, con una velocidad máxima de 270 km/h con el paquete R-Performance.
El chasis cuenta con una puesta a punto mejorada gracias al tren de rodaje DCC sumando al sistema Vehicle Dynamics Manager. Ofrece una conducción confortable en el día a día, pudiendo llegar a ser realmente extremo cuando se le requiere. Además, mantiene su habitabilidad y cuenta con un interior rematado por asientos deportivos y, opcionalmente, aplicaciones en fibra de carbono real. El precio del Golf R parte en Alemania desde 53.795 euros y llega a los 58.440 euros en la Black Edition, aunque en nuestro mercado estará por encima.
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