El fabricante sueco de coches Volvo está desarrollando un sistema de detección de canguros. Puede sonar extraño, tratándose de una empresa escandinava, pero tiene su miga. Y es que los ingenieros de la marca trabajan para evitar colisiones con canguros, lo cual no es en absoluto una tarea fácil debido a la velocidad de éstos animales y sus movimientos impredecibles. El sistema cuenta con un software adecuado de reconocimiento de imágenes que rastrea en todo momento la carretera por la que se circula. De este modo se intenta alerta de la presencia del animal y predecir sus movimientos.
En el momento que el coche detecte el posible accidente los frenos se activan automáticamente con una capacidad de reacción 24 veces mayor a la del ser humano. Y es que una vez detectado el peligro, tarda solo 0,05 segundos en reaccionar, mientras que el tiempo de reacción de un humano estaría en torno a 1,2 segundos. A priori no parece mucha la diferencia de tiempo de reacción, pero en algunos casos puede ser la que evite el accidente.
Este sistema será muy útil para zonas australianas, donde la mayoría de los accidentes se producen por el cruce de un canguro. De hecho, en los últimos nueve años han fallecido 22 personas y 17.000 han sufrido diversos daños en el coche (además de la pérdida de estos carismáticos animales). No es extraño al conocer que se estima que en la zona hay más de 20.000 canguros que lindan con la carretera. Quien seguro aplaudirá este desarrollo son las compañías de seguro que gastan la exorbitante cifra de aproximadamente 50 millones de euros anuales por las consecuencias de estos accidentes.
Pero no nos se trata únicamente de salvar canguros, como podrás imaginar. Quien más y quien menos habrá tenido algún susto de este tipo. Gracias a esta tecnología podrían evitarse muchos de estos sustos con fauna salvaje. De hecho Volvo nos cuenta que la tecnología ha sido calibrada especialmente para «defenderse» de vacas, alces y renos.
Este sistema ya está presentes en la gama Volvo, y han sido refinados especialmente en su último modelo, el Volvo XC90. El uso de esta tecnología se integrará en el paquete de ayudas a la conducción City Safety.
Fuente: Volvo