El MINI Countryman 2021 puso al día a la segunda generación del primer SUV pequeño de corte premium que se lanzó en el mercado. Ahora hay otros productos que intentan hacerle sombra, sobre todo el Audi Q2, y muchos otros generalistas que también pueden ir arañándole ventas.
Desde luego, en España es uno de los productos más demandados de la marca. Lideró las ventas por modelos unos años y en 2019 (las cifras del pasado año están demasiado influidas por la pandemia), una de sus versiones, el Countryman Cooper SE lideró el ranking de ventas de coches híbridos enchufables.
La actualización le ha sentado muy bien, como pudimos ver en nuestra prueba. Tanto estéticamente, con nueva parrilla o grupos ópticos, como por dentro, con detalles que intentan justificar su precio más elevado que la media:
¿Por qué elegirlo antes que otras alternativas? Pues para empezar, por la estética. A pesar de que está lejos de un MINI de tres puertas, nada más verlo lo reconoces como un coche de la marca. Y, para qué negarlo, son coches que molan, diferentes al resto y con un toque retro (aunque jamás existió esta versión SUV hace décadas) que enamora a muchos.
Es también más amplio (se venden muchos más MINI de cinco puertas que de tres justo por eso) y práctico. Y aunque no ofrece las mismas sensaciones de que conduces un kart como otros coches de la marca, desde luego se mueve de maravilla, de lo mejor del segmento en asfalto, sino el mejor. De acuerdo, no le pidas que vaya bien por campo, a pesar de que hay versiones 4×4. Si recorres muchos kilómetros, atención al Cooper D con 150 CV que condujimos, ya que mueve muy bien al coche y gasta muy poco. Va ten bien que quizá no necesites pensar en el SD de 190 CV.
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