No nos cansaremos de decir que los neumáticos son uno de los elementos fundamentales de un automóvil. El único que está en contacto directo con el suelo, uno de los miembros (diríamos incluso el más importante) del triángulo de seguridad. Por eso es conveniente que estén en buen estado. Porque tu seguridad y la de los tuyos (aunque suene a cliché) está en juego.
Pese a ello, la DGT nos advierte cada vez que toca una Operación Salida o Retorno, sea la fecha que sea, que cuatro de cada diez vehículo circulan por la carretera sin haber realizado una mínima inspección de sus neumáticos.
Ya mucho más allá del desgaste (con la banda de rodadura por debajo de los 3 milímetros, tope que sería recomendable e, incluso, un alto porcentaje por debajo del mínimo legal del 1,6). Hay otros problemas del coche que pueden reducir mucho la vida útiul del neumático ya que producenun desgaste irregular en su dibujo.
«El dibujo no es solo un elemento decorativo en las ruedas de los coches, sino que un neumático en buen estado es una garantía de agarre, frenada y eficiencia energética”, indican desde Grupo Andrés, espercialitas en neumáticos. El estado del dibujo afecta a la capacidad de frenada, a la maniobrabilidad del vehículo, a la capacidad de evacuar agua si conduces con lluvia y también a la capacidad de desprenderse de arena o piedrecillas, cuestiones especialmente valoradas en trayectos largos.
Estos cinco errores provocan ocasionan defectos en los neumáticos. Vigílalos:
Presión inadecuada
Llevar los neumáticos con la presión correcta ayuda a la seguridad, a no gastar más combustible del que deberías… y también a no perder dinero cambiando neumáticos más a menudo de lo habitual. Puede ocurrir que:
- Presión excesiva: La banda de rodamiento de un neumático sobreinflado se desgasta mucho más rápido en el centro y es más vulnerable si circula por una mala calzada.
- Presión baja: Perjudica a los extremos (hombros de la cubierta).
Estos daños también pueden aparecer cuando se monta una llanta inadecuada. No elijas llantas demasiados estrechas o demasiado anchas o estarás tirando el dinero en neumáticos.
Mala alineación
De todos modos, por distintos factores, es normal que el desgaste sea desigual entre los cuatro neumáticos de cada vehículo. Por eso es recomendable realizar la alineación de los neumáticos (pueden desalinearse cuando circulas por superficies muy irregulares, pillas un bache profundo o incluso dando un golpe con el bordillo) y también es conveniente rotarlos.
Verás que es necesario realizar ajustes en las cotas de alineación o el paralelismo entre los ejes cuando los desperfectos se localizan solo en uno de los laterales de la banda de rodadura. Si no vigilas la presión y la alineación de los ejes, se reduce hasta en un 20% la vida útil de las ruedas, y un error de sólo 2,5 en el ajuste de un eje puede incrementar el consumo de combustible en un 16%.
Los expertos señalan que es habitual detectar desgastes anormalmente rápidos por circular con neumáticos cruzados al tener la dirección abierta o cerrada, lo que actúa como una lija en el desgaste. En ocasiones no superan los 4.000 / 6.000 kilómetros totales.
Fallo en el sistema de frenos
Es vital saber detectar problemas en los frenos porque un coche ha de detenerse correctamente para que sea seguro. Además de esta obviedad, vigila que el dibujo no se erosione de manera irregular. De ser así, es posible que tu coche no pise de manera correcta, debido a un bloqueo en los frenos o a algún fallo en la suspensión. Si lo que ves es un desgaste escalonado o con forma de dientes de sierra, ya sabes que tu coche tiene un problema que le hará gastar muchas más gomas.
Presión no adaptada a la carga
Un problema muy habitual es no adaptar la presión a la carga del vehículo. Algo que debe tenerse muy en cuenta en viajes con el maletero cargado o en transporte ocasional de objetos voluminosos
Cuando el coche va a llevar mucha más carga de la habitual, para minimizar el riesgo de desperfectos en la banda de rodadura, es recomendable elevar la presión de las cubiertas al máximo recomendado, incluso un poco por encima, y una vez descargado reajustar los valores iniciales.
Elección del neumático inadecuada
De igual modo que no vas con el mismo calzado a una boda que a hacer senderismo, has de elegir un neumágito acorde con el uso habitual del vehículo, su carga y el tipo de superficies que va a recorrer. ¿Cuántos kilómetros te vas a durar? Eso dependen mucho del estilo de conducción (suave, agresivo, intensiva o rápido), que también influirá en el tipo de neumático que elijas.
En función de los terrenos por los que circules, debes elegir cubiertas específicas para evitar el arranque de goma en la banda de rodadura. En los SUV que se usen por caminos, por ejemplo, pueden ser interesantes los neumáticos M+S… y para mayores aventuras conviene elegir neumáticos específicos para todoterreno.
También, en función de donde vivas, puede ser aconsejable montar neumáticos todo tiempo (All Season) que ayudan a circular con la máxima seguridad en cualquier estación del año y ante cualquier situación meteorológica.
Fuente: Grupo Andrés